Fanreal Tsianina&Adrienne (y otras...) Por AnaSullivan

Fanreal Tsianina&Adrienne (y otras...)
Por AnaSullivan

Los Ángeles 2009

Antes de la convención los actores se reunieron en una fiesta privada. Siempre la hacían ya que ninguno de los actores se veía tanto como deseaban. Adrienne llevaba puesto un precioso vestido blanco y entraba por la puerta con el corazón acelerado, iba a volver a verla…

- Hola pequeña – Adrienne se relajo al conocer aquella voz- Hudson- dijo con una gran sonrisa - ¡Cómo me alegro de verte!- se abrazaron.Justo cuando abrazaba a Hudson, la vio pasar, pasó y a penas la miró, iba cogida de la mano de su marido. Sin embargo no pudo evitar seguirla con la mirada, estaba preciosa con un vestido azul claro. Hudson vio la reacción de su amiga ante Tsianina y se dibujo una media sonrisa en su rostro.

- Preciosa ¿verdad?- ¿Qué?- preguntó intentando disimular, aun sabiendo que con Hudson no le iba a servir de mucho.

- Que Tsianina esta preciosa.

- No me he fijado

– Hudson se echó a reír- ……………

- ¡Vale! Sí- dijo bajando la mirada

- tan preciosa como siempre.

- ¿Quién?- preguntó una voz interrumpiéndolas. Las dos se giraron.- ¡Danielle!- dijeron al unísono al ver a Danielle Cormack detrás de ellas.

- Uy… me vais a sonrojar ¿en serio creéis que estoy preciosa?- preguntó bromeando

- Vosotras tampoco estáis mal- miró la cara de sus amigas casi a punto de soltar una carajada

- En serio… venga… ¿quién esta preciosa?Hudson miró a Adrienne y después a Tsianina

-¡Ah vale!... ya no soy la amazona favorita de Eve- dijo sacándole la lengua a Adrienne

- ¿Vamos a saludar a la pequeña reina amazona?Al acercarse, Hudson y Danielle notaron que la mirada de Tsianina se clavaba en la de Adrienne, se tensaba y soltaba la mano de su marido.

- Buenas noches

- Buenas – saludó Michael Lohmann

- Hola chicas- saludó Tsianina, pero sin quitar la mirada de Adrienne.

- Voy a ver si me tomo algo en la barra, estoy algo cansado- dijo MichaelDanielle y Hudson se fueron disimuladamente dejando a Adrienne y Tsianina a solas. Las dos chicas se miraron pero ninguna sabia que decir. Llevaban meses sin verse, sin hablarse… ni una sola llamada.

- ¿Cómo te va todo?- rompió finalmente el silencio Adrienne.

- ¿Eso es lo mejor que tienes?- preguntó muy seria Tsianina.

- ¿Cómo?

- ¿Vamos a seguir así por mucho rato?

- Tsianina, me alegro de verte… yo…

- ¡Adrienne!- dijo una chica morena y muy guapa acercándose a Adrienne, quien se giró, al verla sonrió, la abrazó y la beso en los labios ante los ojos atónitos de Tsianina.

- ¡Cariño! No estaba segura de que vendrías.

- Casi no llego, pero me alegro de estar aquí- dijo abrazando más fuerte a Adrienne, mientras miraba a Tsianina y volvió a besarla, marcando su territorio. Los celos recorrieron el cuerpo de Tsianina escapándosele un ataque de tos.

- Tsianina te presento a Jennifer- las dos se saludaron, pero algo se rompió en Tsianina cuando Adrienne añadió

- Ella es mi novia.

- ¿Tú qué….?- preguntó aun más atónita

- Novia- repitió Jennifer. Tsianina no podía creerlo, necesitaba salir de aquel lugar rápidamente, miró a su alrededor y vio que Hudson estaba muy cerca.

- ¡Hudson!- la llamó- Me alegro de conocerte- miró a esa chica- Nos vemos luego- dijo mirando a Adrienne y dirigiéndose hacia Hudson. Pero al llegar a su altura, se dirigió a la salida de la sala.

- ¡Espera!- dijo Hudson siguiéndola. Tsianina se paró en seco mirando a Hudson- ¿estás bien?- le preguntó.

- Sí, pero estoy cansada, voy a descansar a mi habitación.

- No lo sabías… ¿verdad?

- ¿El qué?

- Lo de Adri y Jennifer

- Hudson… deja que me vaya- Con esta respuesta le dio la espalda y salió de la sala. Danielle y Hudson la miraban irse.

- ¿Entiendes algo?- preguntó Danielle

- Me temo que es una larga historiaTsianina iba por los pasillos del hotel cabizbaja, camino del ascensor. Cuando subió había alguien dentro, pero no prestó atención, ya que su mirada seguía clavada en el suelo. Sólo pensaba y lloraba en silencio por lo que acababa de ocurrir.

- Tsianina… - la chica alzó la mirada para ver que se trataba de Adrienne

- ¿Qué ocurre?- preguntó preocupada. Tsianina intentó salir del ascensor, pero las puertas del ascensor se cerraron, la chica golpeó las puertas.- ¿Pero qué haces?- dijo intentando cogerle de los hombros para tranquilizarla, pero Tsianina no se dejo.

- ¿Por qué no me lo habías dicho? – la miró llena de rabia.

- ¿El qué?

- ¿A ti qué te parece? – cada vez estaba más enfadada.- Lo de Jennifer. Hace tiempo que no hablamos, no sé…- ¿Qué nos ha pasado?- preguntó dándole la espalda. Adrienne puso su mano en el hombro de Tsianina, pero ella la apartó bruscamente.

- Ya lo sabes, llevamos así desde hace mucho.

Desde mi boda. No apareciste. Dijiste que me amabas y no apareciste.

- ¡NO ME LO ECHES EN CARA! No fui yo quien te abandone, casándome… y además te equivocas.

- ¿En qué?

- Estuve allí, justo cuando salisteis tan felices de la iglesia, justo para ver… como te alejabas de allí con él- dijo de espaldas a la otra chica

- ¿¡CÓMO PUDISTE DESPUÉS DE AQUEL MALDITO BESO!? Tsianina… NO PODIA ESTAR ESPERANDOTE TODA MI VIDA

- No arriesgaste nada por mí, te lo iba a dar TODO y a ti te entró el pánico y hoy te veo con… con… esa… esa… mujer

- Fue una idea genial lo de casarte para que me diera cuenta de tus sentimientos- dijo irónica Adri

- Y esa mujer tiene nombre, Jennifer.

- Deja de ironizar no te pega nada…Al salir del ascensor volvieron a ver a Jennifer en el pasillo, nada más ver a Adrienne, Jennifer la besó y le susurró algo al oído, haciéndola reír.Tsianina no podía creer lo que veían sus ojos, y aun menos lo que sentía su corazón. En parte Adrienne tenía razón, era una mujer casada así que no tenía derecho a pedirle ninguna explicación. Pero verla así con aquella mujer la enloquecía, despertaba instintos que jamás pensó tener. Así que se fue casi corriendo hasta su habitación. Cerró de un portazo y pegando su cabeza contra la puerta, volvió a llorar sin consuelo. Se desmoronó y se sentó en el suelo llorando, abrazada a sus rodillas.Adrienne y ella habían sido grandes amigas, inseparables desde que se conocieron en el set de Xena. Adrienne le contó sus secretos, y le confesó que le gustaban las mujeres y Tsianina la apoyo en todo, igual que Adrienne a ella.Hasta que un día…Después de ir a comprar ropa, en casa de Tsianina….Ambas se probaban la ropa que se acababan de comprar. Tsianina se había comprado una camiseta blanca que debía abrochar con un nudo en la espalda y le pidió ayuda a Adrienne.Su gran amiga le ayudó, pero después le hizo un pequeño masaje en la espalda, lo que le hizo sentir calor por todo el cuerpo.

- ¡Wow! Me encanta tu espalda- decía pasando sus manos por la espalda de Tsianina, que sentía su cuerpo arder en cada caricia-¡Vaya músculos!- decía mientras le sonreía, pero Tsianina se giró y cogió por la nuca posesivamente a Adrienne, atrayéndola hacia ella. Antes de que cualquiera de las dos pudiera luchar contra sus instintos ambas se besaban apasionadamente, acariciándose poseídas por la pasión y la atracción que sentían la una por la otra.Después de aquel beso, de cruzar la línea de su amistad, ya no hubo marcha atrás, todo fue de mal en peor. Las preguntas, el miedo a lo que dirían los demás les llevó a separarse.Pero ninguna de ella se dejo de amar, algunas amigas de Tsianina le aconsejaron que se casara, así Adrienne reaccionaría y se confesaría, así conocería los sentimientos de Adrienne. Sé odiaba por ello. Y odiaba a Adrienne por no haber parado aquella ceremonia, por no haber evitado su boda.A la mañana siguiente comenzó la convención, todos los actores intentaban dar lo mejor de ellos a sus fans, en las firmas, fotos y paneles.Mientras Lucy y Renee hacían el gran panel de la convención. Los demás actores se podían mover a su antojo por los pasillos del hotel.Adrienne y Tsianina con sus respectivas parejas se chocaron en mitad del pasillo, ambas se miraron. Ninguna dijo nada, lo que hizo extrañarse al marido de Tsianina. Cuando ya estaban a cierta distancia, el chico preguntó.

- ¿Estás bien? Se me hace raro que no os dirijáis la palabra.

- Sí, es una larga historia, que ahora no tengo ganas de explicar.

- Sabes que antes que tu marido soy tu amigo ¿no? – era cierto, Tsianina le había contado muchas cosas sobre su vida, pero no había ninguna explicación que pudiera darle qué fuese justa para él en esos momentos.

- Lo sé y te lo agradezco.Por la noche, en una de las fiestas de la convención. Fans y actores se lo pasaban en grande. Menos Tsianina, que miraba cada gesto de Adrienne y Jennifer como si fuera a cámara lenta, cada susurró le rompía aun más el corazón. Cuando sonó la canción de Pussy Cat Dolls, “Buttons”Danielle, Hudson y Tsianina se pusieron a bailar entre ellas bromeando. Mientras que Adrienne bailaba con Jennifer, Lucy y Renee. Todos se lo pasaron bien, entre bailes y risas. Cuando se iba acabando la fiesta, el D.J comenzó a poner baladas y Tsianina veía desesperada como Adrienne bailaba sin parar con su novia. “Esa maldita mocosa”- pensaba llena de celos. Mientras bailaba con su marido, él intentaba animarla, pero no lo conseguía.- Si no quiere tú amistad, ella se lo pierde- dijo él cuando vio a su mujer mirando a Adrienne.- Me voy a la habitación – dijo separándose de él – Necesito dormir un poco.Michael no entendía para nada la reacción de su mujer.

Al día siguiente Adrienne iba por el pasillo cuando vio acercarse a Tsianina, seguía llorando y eso le rompía el corazón. Porque sabía que era su culpa y estaba desmoralizada, no sabía qué hacer, había intentado hablar con ella en la fiesta, pero no había podido separarse ni un momento de Jennifer, así que le fue imposible. Se escondió en el cuarto del material, cuando estaba a la altura, Adrienne atrajo hacia si a Tsianina tapándole la boca, asustando a la chica.

- ¡Adrienne pero que…!- Adrienne puso un dedo en los labios de Tsianina haciéndola callar.

- Shhh, escúchame. Lo siento, siento como te he tratado estos días.

- Si sólo fueran estos días… ¿eso es todo?

- Quería despedirme… La convención está a punto de acabarse y no sé si podré tener la oportunidad…- Hasta la próxima convención de Xena- dijo Tsianina- No la habrá, no para mí…

- ¿Qué?

- Me ha pedido que no vuelva a acercarme a ti…- dijo Adrienne bajando la mirada.

- ¿Qué? ¿Por qué?- Yo… bueno… no volveré a hacer una convención de Xena…- Pero eso significa que…- al pensarlo la mirada de Tsianina volvió a llenarse de lágrimas.

- Que no volveremos a vernos nunca más- Tsianina se echó a llorar ante las palabras de Adrienne. Al verla llorar Adrienne no pudo evitar abrazarla

– Por favor no nos hagas esto Adri- dijo Tsianina abrazándola más fuerte, poniendo su cabeza en el hombro de Adrienne, quién le dio un dulce beso en el pelo, mientras le acariciaba su melena.- No quiero hacerte daño, pero tampoco puedo negar su petición… Me duele muchísimo Tsianina, pero no puedo hacer otra cosa…

- Dime que no me amas- le pidió Tsianina, mirándola a los ojos. Adrienne se echó a llorar.

- No puedo mentirte Cho…- Adrienne usó el mote cariñoso que tenia para Tsianina, sólo ella la llamaba así. Tsianina acarició sus mejillas, Adrienne buscó aun más las caricias de Tsianina ladeando la cabeza y frotando sus mejillas contra las manos de Tsianina.

- ¿Has visto a Adrienne? - preguntaba fuera una voz interrumpiéndolas.

- Debe estar preparando sus canciones, creo que el panel de karaoke es dentro de una hora- contestaba el marido de Tsianina.

- ¿Y tu mujer?

- Está en la habitación, quería descansar.

- ¡Ah!Adrienne y Tsianina salieron del cuarto de material, por una puerta trasera y así evitaron ser vistas por sus parejas.Cuando el marido de Tsianina entró en la habitación, su mujer estaba sentada en el suelo con la mirada perdida hacia ninguna parte.

- Hola cariño ¿cómo estás?- Tenemos que hablar… - dijo mirándolo.

- Claro, dime… - dijo sentándose al lado de su mujer en el suelo.

- No sé cómo hacer para no hacerte sufrir

- Se sincera, ya sé que te ocurre algo, tan sólo dime que es…- pidió sincero.

- Adrienne…

- ¿Aun no sois amigas?- preguntó extrañado.

- No es eso…

- Estas enamorada de ella ¿verdad?- Tsianina abrió los ojos sorprendida, ante aquella pregunta directa de su marido

– Creo que es eso lo que te lleva pasando estos días, eso y verla con esa chica.

- Yo…

- Tranquila Tsianina, me lo llevaba temiendo hace ya mucho tiempo. Más aun estos días, cuando has vuelto a verla.

- Da igual lo que yo sienta, me quedo contigo… y ella con Jennifer.

- ¿Le has dicho lo que sientes?

- No…

- ¿Y entonces cómo va a saber con quién quiere quedarse?

- Pero…

- No te preocupes por mí, ni por los niños. Me conformó con tu amistad, si tú eres feliz. Sabremos explicárselo. Pero Tsianina, por favor, lucha por lo que quieres. No te quedes ahí, pensando en que podría ser…

- ¿Por qué eres tan bueno conmigo?- preguntó Tsianina mirándole.

- Porque de alguna manera u otra, tú eres mi familia, eres mi mejor amiga y sólo quiero que seas feliz.

- Gracias- Los dos se abrazaron.

- Lucha por lo que quieres y no temas lo que los demás puedan pensar o decir, lo importante es lo que tú pienses y sientas.Ya en el panel karaoke, a Tsianina le había sido imposible poder hablar con Adrienne. Jennifer no la dejaba ni a sol, ni a sombra. Era imposible que ella pudiera hacer nada. Así que tuvo una idea, ella nunca había cantado en convenciones, pero esa sería su primera vez y seria a lo grande. Seguiría el consejo de su marido, luchar por lo que quería y lo que quería era a Adrienne Wilkinson.Pasó una partitura a la banda, ya que la música seria en directo. Todas empezaron a cantar, incluso Lucy y Reneé. Le tocaba su turno a Tsianina, estaba tan nerviosa por lo que iba a hacer que casi no se había dado cuenta de nada, estaba sentada junto a Hudson ensayando su canción, repitiendo la letra en su mente, no le costaba mucho recordarla ya que era lo que sentía por Adrienne.Finalmente presentaron a Tsianina, la gente enloqueció ya que era la primera vez que iba a cantar y los fans estaban emocionados. Se sentó en su silla con el papel de la letra en su mano y cuando la música empezó a sonar, era una balada heavy con el sonido de un piano, ella empezó a cantar. La primera frase y ya tenía la atención de sus amigos y de los fans. Sobre todo de Adrienne y Hudson, pero también de Jennifer.

“Cuéntame las veces que he perdido la razón por ti,las cosas que he dejado tras de mí,Dormía en tu regazo, ¿quién me iba a decirque tanto amor se había de extinguir?Has vencido, maldigo mi ilusión y mi castigoY volveré como cada amanecerPara postrarme ante tus ojos.Ya lo ves, no hay nada más que este pobre perdedor.Maldito corazón, no sé cómo no has aprendido nada de ella.Otra vez, intentando olvidarte volveré a llorar.Recuerdo tus caricias en la tempestad.Creía que en tus brazos yo había de morir.Que la soledad no vendría nunca.Has vencido, maldigo mi ilusión y mi castigo (dijo mirando a Jennifer)Y volveré como cada amanecer para postrarme ante tus ojos.Ya lo ves, no hay nada más que este pobre perdedor.Maldito corazón, no sé cómo no has aprendido nada de ella.Has vencido, maldigo mi ilusión y mi castigoY volveré como cada amanecer para postrarme ante tus ojos.Ya lo ves, no hay nada más que este pobre perdedor.Maldito corazón, no sé cómo no has aprendido nada.Y volveré como cada amanecer para postrarme ante tus ojos.Ya lo ves, no hay nada más que este pobre perdedor.Maldito corazón, no sé cómo no has aprendido nada de ella…”

Cuando acabó la canción, los fans se volvieron locos aplaudiendo. Adrienne no pudo evitar llorar en brazos de Hudson. Y los demás hablaban de lo bien que había cantado.Los fans pidieron más, Tsianina no podía negarse, pero ya veía la mirada asesina de Jennifer, mirándola fijamente. Danielle también se dio cuenta, así que para evitar que Tsianina se enfrentara sola, salió al escenario. Le preguntó susurrándole al oído si había alguna canción más que le gustaría cantar a Adrienne. Tsianina le sonrió y le susurró que canción cantarían.Era una canción mucho más marchosa, pero no por ello con menos letra. Las dos comenzaron a cantar juntas Don’t Cha de las Pussy Cat Dolls, mientras la bailaban provocativas, lo que hacía que los fans y sus amigos gritaran emocionados.Tsianina vio como Jennifer le hacia una señal como si le fuera a cortar el cuello. Pero eso le daba igual, Adrienne era suya, sentía como Michael la apoyaba, como Danielle y Hudson también. Así que abrazó a Danielle.

Los fans volvieron a enloquecer entre aplausos, para ser la primera vez que Tsianina actuaba, había sido una de las mejores actuaciones de cualquier convención.Finalmente se despidió del escenario, y entró entre bastidores, podía sentir la mirada de Adrienne clavándose en ella. La miró y notó que la actuación no había sido indiferente para Adrienne, cuando se dirigió hacia ella, sin dejar de clavar su mirada en la de Tsianina, sentía el fuego en su mirada, y eso le hizo sonreír. Pero la sonrisa le duro poco cuando vio a Jennifer entre ella y Adrienne, la chica se abalanzó a los brazos de Adrienne de manera posesiva, seguía marcando su territorio, ante los ojos atónitos de Hudson, Danielle, Lucy, Renee y la propia Tsianina.

Pero esta vez era diferente, la mirada de Adrienne seguía clavada en ella y el fuego aun no había desaparecido. Aquella iba a ser la última vez que la viera… odiaba a aquella que ahora estaba en brazos de Adrienne, porque si era cierto que no la vería nunca más por su culpa y aun más sintiendo el fuego en la mirada de Adrienne iba a enloquecer.Rato después ya en su habitación, Tsianina recibió una carta. De puño y letra de Adrienne, la atrajo hacia sus labios y la besó, como si se tratara de la propia Adrienne.

“ Hola Cho!!Wow, has estado increíble esta noche. Estabas preciosa, y esas canciones. Los hiciste enloquecer, bueno… nos hiciste enloquecer a todos. Siento no haber podido decirte nada al acabar la actuación, de verdad, iba a hacerlo pero… bueno ya sabes…Peque eres increíble… ¿Sabes? Llevo media hora pensando en que poderte poner en esta carta, pero no tengo ni idea… Sólo recuerdo tu actuación, cada gesto, cada movimiento… y esa voz, esa voz que llega al alma… No sé, doy vueltas y más vueltas a las palabras en mi mente para conseguir reunir alguna frase con cierto sentido, pero no puedo… voy a volver a mi antigua costumbre de escribir con las letras de las canciones como si se trataran de mis sentimientos, pero realmente esta me parece que describe bien lo que estoy sintiendo. Ojala puedas entenderme…Cariño, ¿por qué llamas tan tarde?Es bastante difícil hablar ahora mismo.

Cariño, ¿por qué lloras? ¿Va todo bien? Debo susurra porque no puedo hablar en alto.Bien, mi chica está en la habitación de al ladoA veces desearía que fueras túSupongo que nosotras nunca avanzamosEs realmente bueno oír tu voz diciendo mi nombresuena tan dulceViniendo de los labios de un ángelOír esas palabras me hacen débilY nunca quiero decir adiósPero chica tú haces difícil ser fielCon los labios de un ángelEs curioso que me llamaras esta nocheY si, yo he soñado contigo también¿sabe él que estás hablando conmigo?¡Te quiero mucho!¡Siempre tuya!Adrienne Wilkinson. (Tu Adri)”Tsianina volvió a besar la carta después de leerla. Ahora sabía que Adrienne le correspondía. Pero tampoco significaba nada, Jennifer se seguía interponiendo entre ambas. Y aquel día seguía siendo el último en que vería a Adrienne. Tan sólo pensar en ello le aterrorizaba, teniendo ganas de hacerse un ovillo en la cama y no parar de llorar. Escribió otra carta como respuesta, si no podían quedar al menos Adrienne también conocería sus sentimientos, si es que no los sabia ya.Llamaron a la puerta sacándola de sus pensamientos.

Tsianina fue a abrir la puerta deseando que fuese Adrienne, pero al abrir se encontró con Hudson y Danielle. Las chicas notaron el cambio, el gesto de decepción en su rostro.- Siento no ser quien querías que fuéramos- dijo Hudson sincera, con tono amable.

- Nada de eso, sois mis amigas y me alegra que estéis aquí – contestó con una sonrisa Tsianina- Pasad hay un par de sillas para sentarse.

- Nos sirven, guapa – dijo Danielle abrazándola y besando su mejilla.Hudson y Danielle se sentaron en las dos sillas y Tsianina al borde de su cama.

- ¡Has estado increíble!- dijo Hudson.

- Casi superas nuestra actuación de “I will survive”- Danielle miró a Hudson- Bueno… no… aun te queda mucho por aprender- bromeó.- Adrienne estaba embobada mirándote – añadió Hudson.

- Ya sabía yo que vendríais a hablarme de Adrienne.

- Es el tema de la convención- dijo Danielle viendo la mirada de preocupación de Tsianina- Me explico… bueno, no… mejor aun explícate tú Hudson.- Veras, ya que no tenemos en esta convención a Afrodita, hemos pensado que podríamos ser las afroditas de la convención e intentar que venza el amor- dijo riéndose con afecto Hudson.

- Como sois- dijo agitando su cabeza - Pero sabes… entre Adrienne y tú y Lucy y Reneé… creo que la próxima convención Hudson y yo confirmaremos nuestro romance- bromeó Danielle mirando a Hudson, guiñándole un ojo.

- ¿Has hablado con ella después de la actuación? – preguntó Hudson evitando aquella broma.

- No puedo…

- ¿Cómo que no puedes? – preguntó Danielle.

- Jennifer no deja que me vea, no quiere que Adrienne y yo quedemos.

- ¿En serio? ¡Qué idiota!- dijo Hudson.- Quizás si yo fuera ella también haría lo mismo, así que no sé… De todas maneras Adri me ha escrito una carta- dijo sonriendo.- Esa es mi peque- dijo orgullosa Hudson mientras miraba a Danielle que se frotaba las manos- Por tu sonrisa debe ser algo bueno.

- Más o menos…Estuvieron hablando un rato más, hasta que por fin se despidieron. Antes de que se fueran, Tsianina les dio la carta.- ¿Si la veis podríais darle esto? Es mi respuesta… no creo que pudiera dársela yo…- No te preocupes, la carta llegará a sus manos sin pasar por las de Jennifer – dijo Hudson.- Promesa de Reina Amazona.

- Gracias Ephiny- bromeó Tsianina

- De nada, reina Varia – dijo guiñándole un ojo.Al salir de la habitación vieron a Adrienne sola, parecía todo señales, esa carta debía llegar a manos de Adrienne.

- ¡Hola chicas!

- Ey Adri, ¿cómo te va?

- Bien, he ido a comprar algo de champan para Jennifer…

- ¿Hay algo que celebrar? – preguntó Hudson

- Un momento de intimidad, supongo, no sé, me pidió que fuera a por él.- Toma- dijo Danielle directa, dándole la carta.

- ¿Qué es?- dijo mirando la carta con el sobre blanco- Tsianina… - se contestó ella misma con un susurro.- Sí, y será mejor que la leas ¿vale?

- Ahora no puedo- dijo devolviéndole la carta a Danielle.

- Léela, no te hará mal- dijo Hudson

- Sí, lo hará, debo centrarme en mi novia y olvidar a Tsianina… fue una equivocación escribirle…

- Adrienne vio por el pasillo llegar a Paul que corrió hacia ella cuando la vio y a Keith en brazos de Michael, los hijos de Tsianina. Paul la abrazó.

- ¡Tía Adri!- dijo con una sonrisa, era la viva imagen de su madre.

- ¡Ey pequeño!- dijo agachándose y abrazándolo- ¿cómo estás?- Michael miró a Adrienne y a su hijo, la odiaba porque estaba perdiendo por ella a su mujer, pero sabía que sus hijos la adoraban y ella adoraba a los pequeños.

- He venido a ver a mama, me ha dicho papa que esta triste – Hudson veía a Adrienne abrazando al hijo mayor de Tsianina y no pudo más que sonreír, era dulce ver como los niños la querían tanto. Michael le pasó al pequeño Keith a sus brazos, los dos se miraron por un segundo.

- Seguro que la animará veros… tenéis que cuidar de ella ¿prometido?

- Sí – dijeron los dos niños al unísono.

- Nos vamos, luego hablamos Adrienne – dijeron Hudson y Danielle, Adrienne cogió la carta que hacia un momento le había dado a Danielle y se la metió en el bolsillo

– Nos vemos Michael.- Hasta luego chicas.Jennifer salió al pasillo ya que Adrienne tardaba mucho y vio a la chica jugando con los pequeños por el pasillo.

Tsianina también salió al escuchar la voz de sus hijos y vio a Adrienne jugando con ellos, no sabía ni lo que sentía su corazón al ver esa escena, sus ojos se llenaban de lágrimas de la emoción, de ver como sus hijos adoraban a Adrienne y que ella también los adoraba, tanto que no se habían dado cuenta de su presencia. Michael entró en la habitación.Jennifer no conocía a los pequeños, así que le hizo gracia ver como Adrienne jugaba con ellos

– Te quedan bien- dijo la chica viendo como Adrienne aun tenía en brazos a Keith y jugaban a que él pequeño era un avión, el niño no paraba de reír – Sí, definitivamente te quedan genial- dijo ella. En ese momento el pequeño vio a su madre.

- ¡Mama! – Adrienne miró a Tsianina con una sonrisa, casi no había oído las palabras de su novia, sólo tenía ojos para Tsianina y sus pequeños. Le entregó a su hijo en sus brazos, acercándose mucho a ella. El niño seguía cogiendo a Adrienne mientras Tsianina ya lo tenía en brazos

– Quiero más avión – pero Adrienne y Tsianina se miraban a los ojos nerviosas, sus miradas llenas de amor no se apartaron durante unos segundos.

- No peques, id con mama y recordad lo que me habéis prometido ¿vale?- dijo Adrienne despidiéndose de los niños.

- Jo Adri, yo quiero jugar más, quiero que juguemos contigo y con mama ¿jugamos a la pelota en el parque?- preguntó entusiasmado Keith.

- Eso no va a poder ser peques, Adrienne está ocupada – dijo Tsianina mirando a Jennifer, ya que se moría de ganas de ir con sus pequeños y con Adrienne al parque o a cualquier lugar y jugar, y formar una familia junto a la persona que más amaba.

- Jo mama, yo quiero- Vaya niño- susurró de mala gana Jennifer, pero lo pudo oír Tsianina, que buscó una respuesta en Adrienne.

- Peque, hoy no puedo jugar con vosotros – dijo agachándose a la altura de niño y removiéndole el pelo- Pero otro día podemos quedar y jugar en el parque ¿vale?- ¿Vendrás a casa con mama? Hace tiempo que no vienes…- Si cuidáis de vuestra mami y os portáis bien os prometo que otro día yo voy y os llevo al parque.- Vale- dijo el niño con una sonrisa. Tsianina adoraba en aquellos momentos aun más a Adrienne, le había dado igual el comentario de Jennifer, había tenido un gesto cariñoso con su hijo, y lo de la promesa de que cuidaran de ella, y que otro día iría a casa, era mucha información para ella, pero era todo bueno así que no pudo evitar dibujar una gran sonrisa en su rostro, solo similar a la de su hijo por aquella promesa de Adrienne.

- Nos tenemos que ir- dijo Adrienne dándole la mano a Jennifer, con la mirada triste, mirando a Tsianina, lo que quito la sonría del rostro de Tsianina de golpe. Jennifer llevaba la botella de champan, y se iban directas a la habitación. La mente de Tsianina se le nubló de las cosas que Jennifer y Adrienne podrían hacer en la intimidad y bajo la mirada, triste.

- Mami, no estés triste, tía Adri jugará con nosotros- dijo el pequeño Keith- ¿Quién es esa mujer mala?- preguntó Paul, refiriéndose a Jennifer lo que le hizo reír levemente a Tsianina.- Es su novia hijo- dijo sincera.- Yo no quiero que venga a jugar- dijo Keith – Es mala y fea.- No digas eso- pidió Tsianina aunque por dentro se reía de lo que acababa de decir su hijo.- Sí, yo quiero que venga Adri sola..., ella no me cae bien- Tsianina casi no podía evitar reír, estaba haciendo mucho esfuerzo para no tener un ataque de risa. - Bueno, si quiere traerla tenéis que ser buenos…- No voy a serlo – dijo sacando la lengua Paul- Se ha llevado a Adri, estábamos jugando… y ahora vuelves a estar triste. - Sí, mami jo – dijo Keith- Yo quiero que los cuatro juguemos… tu reías mucho cuando jugábamos mami, ahora no te ríes y ya no jugamos. Y ella no viene. Y es por esa mujer mala… - dijo Paul.

Adrienne entró en la habitación, Jennifer la empujó.- No quiero que juegues con ellos- Pero… sólo son niños- Son los hijos de Tsianina y no vas a ir a jugar a casa de esa mujer.- Vale, lo siento.- Me alegra que te haya quedado claro.Adrienne entró en el baño y se encerró para leer la carta, pero no podía evitar llorar, quería a Jennifer, pero Tsianina siempre había sido Tsianina… y era el nombre que su corazón gritaba.Desde aquella vez que la conoció en el set de Xena, desde el principio hubo química, ella estaba recién divorciada, y aunque lo estaba pasando mal, Adrienne era capaz de hacerla reír a carcajadas.

Se había enamorado de ella desde la primera vez que la vio vestida de Varia, era una mujer sexy, simpática e inteligente. Se negó a sí misma darse la oportunidad de tener algo más que una gran amistad con ella, a pesar de que en los momentos más importantes de sus vidas estuvieron juntas. Uno de los momentos que más recordaba era su primer parto, había sido difícil y ella preocupada llegó corriendo al hospital para verla, para estar al lado de Tsianina. Los hijos de Tsianina la querían a ella como si fuera de la familia, porque siempre se habían visto y jugado juntos. Era la tía divertida que siempre estaba dispuesta a jugar con ellos y a mimarlos.Recordó aquel día tiempo atrás en que Tsianina se lanzó y le dio un apasionado beso, nunca había besado ni antes ni después así a nadie, ni la habían besado así.

Había tanto amor que le dolía el corazón, de tanto quererla. Pero tuvo miedo, ella tenía claras sus tendencias, pero Tsianina sólo se había fijado en ella, sólo la había besado a ella, era la única mujer en su vida, y si aquello salía mal, se arriesgaba a perder su amistad. Se negó y le negó a Tsianina la oportunidad de amarse, después hubo aquella boda. Aquel hombre que se atrevió a amar a Tsianina, desde que la vio en Bring it on. Un ayudante de cámara se había llevado a la mujer de su vida, y ya era tarde para hacer cualquier cosa.Y en esos momentos se interponían Michael y Jennifer entre ellas, por su miedo había dejado perder la oportunidad de su vida, de estar con su alma gemela. Nunca amaría a nadie como amaba a Tsianina, pero estaba Jennifer, no quería hacerle daño, así que siempre cumplía todas sus peticiones, aunque fuera no ver más a su reina amazona, su musa, su todo…

Estaba a punto de romper la carta, no quería leerla, pero hubo algo que la empujo a hacerlo…“¡Hola cariño!Sí te entiendo, entiendo mejor de lo que piensas cada uno de tus movimientos, de las cosas que haces. Ya te lo dije una vez, te conozco mejor que nadie… bueno quizás nuestra amiga Hudson también te conozca, pero ya me entiendes tú a mí.Yo también deseo ser ella, pero no solo a veces, lo deseo todo el tiempo. Deseo estar a tu lado, como tu gran amor, cuidar de mis niños contigo… no separarnos más. No me da miedo Adrienne. Sé que nunca quisiste nada conmigo, porque no sabías que era lo que yo podía sentir por ti, si no había sentido esto por una mujer. Bueno Adri, a día de hoy te puedo decir que no lo he sentido ni por una mujer ni por un hombre, sólo por ti mi amor.Sé que cuando el amor es real, es para siempre, así que recuerda por favor lo que podíamos ser y no tengas miedo. Sólo hay un “tú y yo” en nuestras vidas y lo formamos nosotras.

¿Recuerdas lo que me escribiste una vez? No llegó a mí a tiempo, era cuando me iba a casar y no llegó… nunca te dije que la había recibido después, pero sí mi vida, la recibí. Y ahora te dedico la misma canción que tú me escribiste entonces….Este romeo está sangrando pero no puedes ver su sangre No es nada, solo algunos sentimientos. Ha estado lloviendo desde que te fuiste, ahora estoy ahogándome en el torrenteTú viste que siempre he sido una guerrera pero sin ti me rindoAhora no puedo cantar una canción romántica, de la misma manera que solía hacerloBien, supongo que nunca he sido buena Pero cariño, simplemente soy yo.Y siempre te amare, cariño, siempreY por siempre y un día estaré allí, siempre Estaré allí hasta que las estrellas no brillen, hasta que el cielo explote yLas palabras no rimenY sé que cuando muera, tú estarás en mi mente. Te amaré, siempreAhora las fotografías que dejaste atrás son solo recuerdos de una vida diferente.Algunas nos hacen reír, y otras llorarQue daría yo por pasar mis dedos por tu pelo, por tocar tus labios, abrazarteHe cometido errores…

Cuando ella te abraza, cuando ella te atrae cerca Cuando ella dice las palabras que tú has necesitado oír Desearía ser ella porque esas palabras son míasPara decírtelas hasta el fin de los tiempos.Si me dijeras que llorara por ti, lo haríaSi me dijeras que muriese por ti, podríaMírame a la caraNo hay precio que no pagase por decirte esas palabrasBien, no ha habido suerte en esta tirada de dadosPero cariño si tú me dieras otra oportunidadRecogeríamos nuestros viejos sueños y nuestras viejas vidasEncontraríamos un lugar donde el sol aun brille.

Y te amaría, cariño, siemprePor favor Adrienne, te quiero… no puedo creer que quizás hoy sea la última vez que vaya a verte, porque sin ti nada tiene sentido, porque cuando estas cerca mío todo empieza a encajar entiendo y acepto los grandes misterios que nos depara la vida, pero sin ti… ni siquiera creo que haya algo llamado vida.Tuya siempreTsianina (Tu Cho)”Adrienne no pudo evitar llorar, fue resbalando su espalda contra la pared, y cayó finalmente sentada, con la carta en una mano y con la otra aguantándose el pelo desesperada, aquella que tanto amaba, también la amaba a ella. Pero ahora fuera, en la habitación, la esperaba Jennifer, intentó que su llanto no sonara alto, para que la chica no hiciera preguntas.

Y pensó en Tsianina, en su rostro, en su sonrisa, en esa mirada picara que tan loca le volvía, mientras que apoyaba su cabeza contra la pared. Tenia de nuevo la oportunidad de amarla, ante sus ojos, el destino le había dado una nueva oportunidad, una bastante más difícil, ya que esta vez no sólo les separaba sus miedos si no Jennifer y Michael, pero si había de luchar, lucharía. Se secó las lágrimas y salió del cuarto de baño.

- ¿Estás bien? – preguntó Jennifer, intentando seducirla, la abrazó y empezó a besar su cuello, pero en la mente de Adrienne sólo había una mujer, y a pesar de que su cuerpo dijera que sí a aquellas caricias, su corazón era quien hablaba por ella, cansado ya de engaños.

- Debemos hablar Jennifer…

- ¿De qué?- preguntó seria.

- De mí, de ti…de…- Tsianina- dijo Jennifer.- Sí, también de ella… lo siento Jennifer, te aseguro que lo siento… pero no puedo evitarlo. No quiero hacerte daño, es lo último que pretendo, pero la amo…- ¿A esa estúpida?- Jennifer por favor…- Esa mujer es una zorra… ¿te crees que va a ser diferente ahora que antes? Nunca te amará- Me ama- Te engañas, ¡ella es una zorra y tú la estúpida!Dijo saliendo de la habitación, Adrienne le siguió para que no montase ningún espectáculo, pero al salir vio a Tsianina besando en la mejilla a Michael.- ¿Ves?- preguntó enfadada Jennifer señalando a Tsianina- Mientras tú piensas que ella te ama, ella te engaña y te engañara siempre…- Tsianina y Michael se quedaron mirando a la pareja discutir.

Pero Adrienne se sentía engañada después de ver aquel beso, tal vez Jennifer tuviera razón.- Tal vez tengas razón, pero no armes un numerito, por favor…- dijo Adrienne llorando- Se acabaron los numeritos de todo tipo Adrienne, tú prefieres quedarte con esa HETERO, que estar con alguien que puede amarte de verdad… no vale ni discutir…- dijo Jennifer echándose a correr, seguida por Adrienne.- ¡Adrienne por favor espera!- gritó Tsianina cogiéndola del brazo.

- ¡Déjame Tsianina! Después de lo que me has escrito, te encuentro besándolo…- ¡No es lo que parece, me estaba despidiendo de él!- No quiero que juegues más con mis sentimientos- dijo corriendo, siguiendo a Jennifer.Tsianina se quedo en mitad del pasillo junto con Michael y sus hijos mirando al vacio, a donde hacia un momento había estado Adrienne… ¿Tan poco confiaba en ella como para creerse que hubiera jugado con sus sentimientos?Meses después…Hudson iba conduciendo por la urbanización de Los Ángeles donde vivía, hacia su casa. Pero a lo lejos vio algo que no esperaba, Danielle estaba en un jardín casi entrando en una casa. Le extraño, ya que Danielle vivía en Nueva York, paró el coche enfrente de la casa y tocó la bocina, bajo la ventanilla y le gritó.- ¡Hola bombón!- riéndose y después silbándole.

- ¡Vaya mira quien tenemos aquí!- dijo acercándose a Hudson, que ya había salido del coche. Las dos se abrazaron afectuosamente.- Eso digo yo ¿qué hace mi bomboncito por aquí? ¿Dónde está tu marido?- sonrió Hudson.- Me va mejor estar aquí para rodar la nueva serie. Te iba a avisar ahora mismo, no quería decirte nada hasta que no estuviese segura- dijo sin soltar su mano- Sobre mi marido… bueno… pues debe estar con su amante por Nueva York.- ¿Qué?- preguntó sorprendida Hudson.- Me ha dejado por una más joven- dijo triste.

- Que capullo…. ¿cómo puede hacerle algo así a mi bomboncito?- Cómo me sigas diciéndome bomboncito vas a hacer que me lo crea- dijo sonriéndole, aun con la mirada algo triste.- ¡Ays perdón! Me alegro tanto de tenerte por aquí…- señaló su coche - ¡Anda sube!- Yo también me alegro de estar aquí. ¿Qué tienes pensado?- dijo dirigiéndose junto con Hudson hacia el coche.- Hay que celebrar que somos vecinas y que eres libre- dijo poniendo su brazo alrededor del cuello de Danielle- ¿o no?- preguntó guiñándole un ojo.

- ¡Fiesta!- exclamó Danielle con una sonrisa - ¿dónde me llevas?- No sé, pero tengo que llevarte por ahí, haber si encontramos a alguien que te quite las penas, estas preciosa esta noche, seguro que ligarás.- Buena idea- dijo riéndose.Las dos pasaron la noche de fiesta en una discoteca de las afueras. Eran las mejores amigas, un binomio y debían celebrar que ahora vivían en la misma ciudad. Más oportunidades para hacer locuras juntas.Cuando ya estaban agotadas Hudson acompañó a Danielle, quién iba algo bebida, a casa. La acompañó hasta la puerta de casa.- Entra- pidió Danielle, cuando estaba en la puerta.- Mejor no- dijo Hudson nerviosa.- ¿Por qué?- Danielle, porque necesitas descansar, mañana vendré a ver qué tal estas.- Hudson… ¿recuerdas lo de hacer nuestro romance oficial?- preguntó directa, Hudson hizo un movimiento con su cabeza para afirmar,

Danielle se acercó a su amiga y susurró sensual – Entra por favor.- Dani … no creo que este bien- ¿No te gusto?- preguntó girándose para afrontar su mirada.- Da… - Danielle besó el cuello de Hudson, quien se sentía muy atraída por Danielle desde hacía mucho, aun sin confesarlo. - ¿No te atraigo?- Danielle seguía besando el cuello de Hudson, hasta que la otra chica no pudo evitarlo y soltó un ligero gemido- Veo que sí…- ¡Para! has bebido y…- Danielle se separó de Hudson y esta pudo verla sonreír, alzando una ceja.- No he bebido tanto… tontita- Danielle estaba totalmente serena cuando dijo eso, lo que provocó que Hudson se sonrojara, al descubrir que no era cosa del alcohol - ¿Pero por qué has hecho que estabas borracha? – dijo poniendo cara de “te vas a enterar”

- Quería que me acompañaras a casa, quería ver si en el fondo eras una buena chica.- Pero si ya sabes que lo soy – dijo sacándole la lengua.- Si bueno en realidad… - ¿En realidad qué?- preguntó acercándose más a ella.- Te deseo- dijo besando suavemente el lóbulo de su oreja- mucho- le susurró - ¿Entras?- ¡Prepárate!- dijo riendo. Las dos bromearon por las escaleras, Hudson alcanzó a Danielle y la cogió por la cintura, las dos se reían a carcajadas. Hasta llegar a la habitación de Danielle, las dos dejaron de sonreír a causa de los nervios - ¿Estás segura?- preguntó nerviosa Hudson al ver la cama, aun seguía abrazando por la espalda a Danielle. Pero no quería que la amistad y las locuras acabasen para ellas, por una noche de pasión. Danielle empujó a Hudson a su cama y se puso encima de ella, las dos se miraban, dominadas por la pasión.- ¿Responde esto tu pregunta?

- Danielle empezó a besar sensualmente a Hudson, seduciéndola, acariciándola por debajo de su ropa muy despacio. Las dos se miraron a los ojos.- Totalmente- dijo Hudson devolviéndole las caricias a su amante y mejor amiga.Las dos hicieron el amor durante horas, hasta que ya al amanecer se quedaron dormidas la una abrazando a la otra. Las que siempre habían sido amigas y compañeras de locuras, compartían la mayor locura juntas, la de amarse. Horas después Danielle despertó a Hudson con un dulce beso. Hudson le sonrió - Buenos días- Creo que más bien, es… buenas tardes – dijo con una sonrisa llena de felicidad en su rostro.- ¿Qué dices?- dijo Hudson despertándose de golpe y mirando el reloj.- ¡¡No!! Tenía que dar clases de yoga…- dijo poniendo su mano en su frente. ¿Y qué les voy a decir?- Que tu Danielle, Dani, Da… necesitaba unas buenas prácticas de yoga – dijo echándose a reír.- Oye… no es mi culpa que ayer me pusiera tan nerviosa… tú no ayudaste…- Oh pobrecita ella… ¿cómo puedo ser tan mala?- dijo dándole un beso en la frente

– No sé, diles que tenias una entrevista por lo de la película de Xena.- ¡Genial! ¿Qué haría yo sin ti?- Una palabra…- dijo con una mueca divertida en su cara- Abuuuuuuuuuuurrirte….- Tienes razón.- ¿Sabes? Hablando de Xena… podrías invitar a Adrienne a cenar… hace tiempo que no la veo.- Pues sí, podría, últimamente lo ha estado pasando fatal- dijo levantándose y vistiéndose.- Y ya de paso invita a Tsianina…- ¿Qué tienes en esa mente tan perversa?- dijo mientras jugaba con los rizos de la melena de Danielle.- ¿Yo?- preguntó con un gesto exagerado, llevándose la mano al pecho – Jolín Hudson, que mal concepto tienes de mí ¿eh? Que no soy tan mala….- Sí, pero te conozco y algo planeas…

- No sé, noche de parejitas.- Sí, hay un problemilla insignificante- dijo haciendo un gesto con la mano Hudson – Tenemos a dos, que aun no son parejita.- ¿No me digas qué…? ¿Aun? Pero si…- Cualquier pregunta que se te venga a la mente relacionada con Tsianina y Adrienne, ya se me ha pasado a mí por la cabeza….Una ya ha dejado al marido, la otra dejo a su novia hace ya meses, las dos viven llorando las penas, una sin la otra… - dijo encogiéndose de hombros- A mi no me preguntes…- ¿Ves Hudson? Necesitan una cenita con nosotras… después cambiaran de opinión- dijo guiñándole un ojo.- Eres muy peligrosa- le guiño el ojo bromeando.- ¿Ya te has dado cuenta amor?- dijo mirando la cama – Siempre consigo lo que me propongo- le devolvió el guiño del ojo con una sonrisa picara.

Hudson llamó a Adrienne un rato más tarde, para quedar para aquella noche. Recordaba la última vez que había intentado quedar con ella, sólo hacia un par de días. Había llegado a casa de Adrienne y la había encontrado en el sofá, desaliñada, con un montón de clínex a su alrededor y mirando álbumes de fotos de hacia años, cuando Tsianina y ella eran amigas y nada se interponía entre ellas. Recordó cuando le hizo leer la ultima carta que Tsianina le había enviado, no había tenido ni el valor para leerla, el miedo la había vencido, miedo a perderla, sabiendo que ya la había perdido. Recordó cuando la leyó ella misma en voz alta para que Adrienne se diese cuenta de lo que allí ponía.“Hola Adri… Ha pasado tanto tiempo, quisiera saber cómo estas… Yo…podría engañarte, pero no lo haré, estoy cansada de que nos engañemos mi vida. Lloro cataratas de dolor cada día que paso sin ti. Te amo tanto que mi corazón siente un enorme dolor, las imágenes del ayer se agolpan si concilio el sueño. Me encierro en mi habitación y te escribo con la esperanza de calmar este dolor pero es peor, es como una espada que se clava en lo más profundo de mi ser. Escondo un alma dependiente de tu cuerpo, y de tu mente. Anochece después de comer, llueve sin llover en mis días sin ti.

Tengo tanta rabia acumulada… Sin verte tengo la sensación de que lo he perdido todo. Mi corazón se va rompiendo. Quiero creer que volverás, pienso en volver a estar entre tu abrazo. Anhelo tanto un te quiero sincero, que salga de tus dulces labios. Tengo esperanzas porque no acepto tu adiós. Porque sé que debes estar como yo… lagrimas en soledad, gritos en silencio, risas para ocultar lo que de verdad estas sintiendo. ¿Me equivoco?De verdad, si no me amas tú, nadie podrá. Sonrió aunque mi corazón este triste. Mi mirada me delata tantas veces, aunque intente ser una guerreraA veces el sol se va, y las nubes cubren el cielo, la tristeza se lleva otra vez la felicidad que no tuve… el mundo se deprime a mi alrededor. Si te vas como te voy a decir que siento que no encajo, que estoy perdida en este universo. Si amarte es un pecado, por favor que alguien me crucifique, todo lo que quiero es que estés a mi lado…Te quiero Adrienne, por favor… “ Recordó la mirada de Adrienne en aquellos momentos, como se abrazó a ella, como se hizo la promesa de que iba a comenzar a ser valiente, para no sufrir más.

Esperaba que aquella noche fuera diferente y que junto con Danielle consiguieran que sus amigas por fin estuvieran juntas y felices. Esperaba que la idea de Danielle fuese buena.Después llamó a Tsianina con la misma intención, poder hacer que sus amigas se unieran otra vez. Después de aquella noche con Danielle sabía que cuando una seguía su corazón encontraba la verdadera felicidad y quería hacérselo ver también a Tsianina y Adrienne.Ya era de noche cuando Hudson llegó a casa de Adrienne, hacía calor así que iba guapa pero informal, con unos pantalones tejanos claros y rotos, una camiseta blanca y una chaqueta tejana. Al ver a su amiga la sonrió, lo que hizo feliz a Hudson, parecía otra, con ganas de arreglar las cosas, empezando por ella misma.[/size]-¡Me alegro que pensaras en quedar a cenar!- le dijo acercándose al coche.-¿Y esa sonrisa?- preguntó Hudson-Estaba cansada de llorar, nunca me ha aportado nada.-Buena idea, además nunca sabes quién se puede enamorar de tu sonrisa- le dijo guiñándole un ojo.-No, pero sé quien quiero que lo haga- dijo subiéndose al coche.

-Ufff… pues creo yo que ese alguien, yo también lo sé- dijo riéndose.[/size]-Si pero lo que yo no sé, es quién es esa mujer preciosa y misteriosa que te ha conquistado ¿Cómo se llama?-Ya lo sabrás… venga vamos que nos está esperando.Adrienne se despertó sobresaltada lo que asustó a Hudson. Se había quedado dormida en el camino, ya que Hudson y ella vivían lejos.- Ey pequeña, tranquila estás conmigo.- ¡Corre!- ¿Dónde?- preguntó Hudson extrañada.- Hacia el cruce de las vías del tren.- Pero…- ¡Corre!- ¿Correr como… acelera un poco más o como yo te pagaré la multa?- Corre como te pagaré esta y cualquier multa que tengas – la miro inquisitivamente.- ¿Qué ocurre pequeña? – dijo acelerando al máximo- ¿Tienes un cuchillo?- Adri… ¿te has vuelto loca?- ¿Lo tienes?- Explícame que pasa- dijo bajando un poco la velocidad.- No hay tiempo para eso ¿lo tienes o no?- Lo tengo en la guantera – dijo acelerando aun más - ¿Qué has visto? – Hudson recordó que Adrienne le había contado una vez que a veces tenía algo así como sueños premonitorios, no tenía claro que eran, ella la había creído como amiga, pero estaba segura que ahora mismo le había ocurrido.

No volvió a preguntar más, se limitó a acelerar y correr, dándole igual el sonido de los claxon de los demás coches que se encontraban en su camino. Sabía conducir perfectamente como para que no hubiera ningún accidente, pero aun así rezó para que no ocurriese nada en su camino.Llegaron y vieron una ranchera en mitad de las vías del tren. Adrienne salió del coche, cogiendo el cuchillo y corriendo hacia aquel coche, tan familiar para Hudson. Volvió a mirar el coche y miró hacia los lados, y vio aterrorizada la luz del tren. Adrienne estaba arriesgando su vida para salvar a quien estuviese en el coche, y Hudson la sentía como una hermana así que salió a intentar ayudarla. Cuando pudo ver quien había en el coche aun se aterrorizó más, Tsianina se había quedado casi paralizada por el miedo y Adrienne intentaba cortar el cinturón que debía haberse quedado atascado.

- Adrienne… - dijo en un susurró Tsianina con la voz rota - ¿Cómo…- Te voy a sacar de aquí, cariño- dijo intentando cortar el cinturón, esta vez con la ayuda de Hudson. Tsianina miró que cada vez la luz del tren estaba más cerca.- Iros chicas, por favor… el tren se acerca… no hay tiempo.- ¡CALLA! Jamás te abandonaré- le gritó Adrienne, finalmente las chicas pudieron cortar el cinturón. Y con todas sus fuerzas y todo lo rápido que pudieron sacaron a Tsianina del coche y de las vías del tren.Tsianina abrazó llorando a Adrienne justo en ese momento el tren chocó contra el coche, las tres miraron en la dirección de lo ocurrido debido al ruido del choque. - ¿Cómo has sabido que…?- preguntó Tsianina entre asombrada y aterrorizada por lo que acababa de ocurrir.- No lo sé… intuí que estabas en peligro… y no podía dejar que nada te ocurriera.- Gracias Adrienne acabas de salvarme la vida- Tsianina miró a Hudson – Gracias amiga.- Nunca me perdonaría no haberlo hecho- dijo con una sonrisa y soltando del abrazo a Tsianina, al escuchar las sirenas de policías.- Abrázame – pidió Tsianina, Adrienne no se negó – Tenia tanto miedo… el coche se me quedo ahí en mitad, y no podía hacer nada… y el cinturón se atascó… pensaba que no saldría… pensé en ti… - Me alegro de haberme ganado una multa – dijo Hudson interrumpiéndolas y quitándole hierro al asunto, porque sabia que sus dos amigas, al igual que ella, seguían aterrorizadas. Además no era como a ella le hubiera gustado, pero Adrienne y

Tsianina estaban abrazadas, por fin a salvo y sin ganas de separarse, lo que era un gran comienzo para el plan de Danielle y de ella misma.Después de hablar con la policía sobre lo acontecido.- ¡Vámonos niñas que hay unas berenjenas rellenas esperándonos! – dijo poniendo sus brazos alrededor de los hombros de Tsianina y Adrienne - Y como lleguemos tarde…A Adrienne le entro la risa - ¿Le tienes miedo a tu mujercita?- le preguntó guiñándole un ojo.- Un poco – las tres se rieron.Cuando llegaron a casa, Danielle estaba esperándolas en el jardín, aun con el susto en el cuerpo desde que Hudson la había llamado para explicarle lo ocurrido.- ¿Danielle también está invitada? – preguntó Adrienne con una sonrisa- Hola chicas – dijo Danielle abrazando fuerte a Tsianina y a Adrienne - ¿Estáis bien?- Sí – dijo Tsianina sonriendo dulce a Adrienne - ¿Y cómo estás tú? ¿Ya conociste a la novia de Hudson?- preguntó interesada, lo que hizo reír a Danielle.- ¿Qué pasa que yo no tengo abrazo? – preguntó Hudson acercándose a ella.- Claro que si - contestó Danielle acercándose más a ella y después de guiñarle un ojo - Y más aun – dijo besándola ante la mirada atónita de Adrienne y Tsianina.- Pero tu novia…. – dijeron al unísono, mirándolas.- Presente – contestó Danielle abrazando a Hudson.- ¿QUÉEEEE? – preguntó Adrienne…. – Danielle y tú… pero si… pero si…- Ahora entiendo lo de que tuvieras miedo a llegar tarde – dijo Tsianina – Danielle es la única persona que podría darte miedo – dijo riendo.- Afirmativo, chicas os presento a mi novia Danielle Cormack – dijo Hudson.- ¡Wow! Felicidades chicas – dijo Tsianina- Si, felicidades a las dos – añadió Adrienne.- Felicidades a vosotras también – dijo Danielle, mirándolas.- No si ella y yo… bueno… - tartamudeó Adrienne señalando a Tsianina.- Aun tenemos que hablar – dijo seria Tsianina.Pasaron un rato genial, mientras cenaban las cuatro se reían y todo el plan de Danielle y Hudson funcionaba ya que Adrienne y Tsianina volvían a ser el binomio cómplice, bromeando, acabando las frases la una de la otra, riendo, susurrándose cosas en el oído. Cuando acabaron y les vencía el sueño…- Sólo hay dos habitaciones en la casa- dijo Danielle.- Pero podéis quedaros, la cama de la habitación es grande – le sonrió Hudson.- No tranquilas, yo me quedo en el sofá. Después de los nervios que has pasado necesitarás descansar – le dijo a Tsianina.- ¿Qué pasa que si subes no la vas a dejar descansar? – preguntó Hudson echándose a reír.- No… no es eso – dijo sonrojándose – Me quedo aquí, el sofá es grande también.- Como quieras – dijo Tsianina y añadió amable – Si quieres me quedo yo en el sofá y tú duermes en la cama.- No, estaré bien.

Por la noche Adrienne no podía dormir, el sofá no era tan cómodo para dormir como parecía y lo que había pasado aquella noche se le venía a la mente otra vez, el tren, el coche… volver a ver a Tsianina, sus sonrisas, su mirada, todo la presencia de Tsianina la volvía loca, aquella mujer estaba al borde de la perfección.Escuchó a alguien bajando las escaleras y espero que fuese Tsianina, su corazón empezó a latir fuertemente con ese pensamiento.- Buuuuuu – bromeó Hudson cuando la vio despierta- ¿Qué pasa amiga, no puedes dormir?- Que va… estoy nerviosa o algo… no sé, pero estoy bien – dijo nerviosa saliendo de sus sensuales pensamientos con Tsianina.- Ay mira que eres tontita, no subir ahí arriba con tu niña. Con lo que deseas estar ahí ¿eh?- preguntó guiñándole un ojo.- No quiero forzar los acontecimientos… no quiero ir deprisa…- La conoces desde hace ocho años, eso no es ir deprisa… Adrienne por favor, deprisa dice…- Lo sé. ¿Qué haces tú despierta?- Pues que Danielle se despertó con sed e iba a buscar algo de agua.- Vosotras… es increíble… me alegro mucho que dos de mis mejores amigas… hacéis buena pareja, siempre lo pensé, me alegro.- Gracias – dijo sonriendo.- ¿Quién dio el primer paso?- Dani…- No me extraña, eres tan parecida a mí…- ¿Tú tampoco te atreves a dar el paso?- Que va, he pensado mil cosas para decirle pero cada vez que me sonríe se me olvida todo.- Bésala.- Pensaré algo para mañana.- Ok, pues yo voy por el agua y te dejo descansar. ¡Buenas noches!- ¡Buenas noches! Descansa Hudson. No hagas maldades – dijo riendo.- Igualmente o no – le devolvió la sonrisa.Al cabo del rato Adrienne volvió a escuchar a alguien y pensando que era Hudson se hizo la dormida. Pero una dulce voz le susurró.

- Hola Adri ¿estás despierta?- Tsianina – susurró Adrienne casi un suspiro abriendo los ojos y maravillándose al ver a Tsianina vestida con un camisón negro que dejaba poco a la imaginación – Si estoy despierta.- No podía dormir…- Yo tampoco – se sinceró, poniéndose de pie.- Tenemos que hablar y no puedo esperar a mañana… pero si quieres hago un esfuerzo… no quiero desvelarte…- Yo tampoco puedo esperar a mañana… llevó pensando sin dormir toda la noche.- Gracias por salvarme… otra vez- ¿Otra vez?- Salvaste mi corazón enseñándole lo que era amar… y hoy me salvaste la vida.- Tsianina yo…- Shhh- Ha sido el invierno más largo de mi vida, sin ti, después de todo lo que paso…

- Calla… todo eso ya lo sé. ¿Nos podemos saltar todas las disculpas y eso? Porque he estado pensando toda la noche que decirte y son tantas cosas que no sé por dónde empezar. Pero necesito besarte Adrienne. Adrienne se acercó a Tsianina nerviosa, con el corazón acelerado y temblándole el pulso. Tsianina esperaba las caricias de Adrienne de igual modo, sentía latir tan fuerte su corazón que no podía ni siquiera pensar.

Por fin Adrienne unió sus labios con los de Tsianina, en un tierno beso. Tsianina suspiró y Adrienne besó su cuello y acarició su espalda despacio y suave. Las dos lloraban con cada caricia que se ofrecían, ya que las sentían como algo milagroso que curaba todas sus heridas.

- Te amo Tsianina – le susurró en el oído- Te amo Adrienne… cariño – le contestó abrazándola – Puedes subir a la habitación conmigo y abrazarnos toda la noche.- Me encantaría mi vida.Subieron las escaleras, y nerviosas se tumbaron en la cama, las dos temblaban por todo lo que sentían en aquellos momentos. Adrienne abrazó a Tsianina y las dos se miraban a los ojos sin pronunciar una sola palabra hasta que se quedaron dormidas.A la mañana siguiente se arreglaron y bajaron hasta la cocina, sonriéndose, cómplices de que por fin podían amarse, que ya no había barreras entre ellas. Cuando llegaron a la cocina, Hudson y Danielle se rieron con afecto.

- ¿Dónde estabas Adrienne? – preguntó Hudson.- Con Cho – dijo abrazando a Tsianina.- ¿Ya? – preguntó Danielle esperando la respuesta.- Ya – dijo Tsianina – Adrienne y yo hablamos ayer noche, todo está claro entre nosotras, la amo – Adrienne le sonrió.- Felicidades – dijo Hudson abrazando a Adrienne.- Gracias.- Habíamos pensado pasar el día en la playa ¿queréis venir con nosotras?- Tengo que ir a recoger a mis pequeños – contestó Tsianina - ¿Quién me lleva?- Te va a llevar Adrienne, y quedamos en la playa ¿ok? – contestó Hudson, con una sonrisa – entregándole las llaves de su coche a Adrienne.- Vale, seguro que los niños estarán felices de verte – contestó Tsianina mirando con cariño a Adrienne.Rato después Adrienne ayudaba a subir al coche a Paul y Keith, ambos estaban muy felices de ver a Adrienne.

- ¿Jugaremos en la playa? – preguntó Keith.- Claro, por eso vine – contestó Adrienne.- ¿Quieres a mama? – preguntó Paul, el hijo mayor de Tsianina - ¿Y a nosotros?- Claro que sí, los tres sois mi familia.- ¿Te quedaras con nosotros?- Si vosotros queréis, sí.- Mami dile que sí, ella nos quiere – Tsianina miró a Paul.- Por supuesto que sí – Adrienne y Tsianina se sonrieron.Subieron al coche y arrancaron, dirección a la playa. Adrienne puso uno de sus cds, que Hudson guardaba siempre en el coche. Eran éxitos de Disney, Tsianina la miraba con una gran sonrisa, por el detalle que había tenido con sus hijos. Empezó a sonar la canción de Lilo y Stitch, los dibujos favoritos de los hijos de Tsianina. Adrienne empezó a cantar la letra, seguida por pequeños.

Adrienne: When you´re down, you´re feeling lowGot nobody by your sideIt can be lonely, and you want to onlyPaul: Find a place no need to hideJust lay back you´ll fit right inTsianina: You can make all come trueCause there´s always hope insideKeith: And hope will see you throughAdrienne: Aloha,You´ll find the place where you belongTsianina: O´hanaA family to call your ownWhere you feel at homeAdrienne: Everybody singTodos: Welcome cousin e komo maiAloha, e komo maiPaul: Now you can see...Nothing but these clear blue skiesTsianina: Love it has fond you, and when it surrounds youAdrienne: It´s just like a paradisePaul: Now the door has swing wide openNow your heart has taken wingKeith: Feel the magic in the airOh, hear your spirit singAdrienne: Aloha,You´ll find the place where you belongTsianina: O´hanaA family to call your ownWhere you feel at homeAdrienne: Everybody singTodos: Welcome cousin e komo maiAloha, e komo maiWelcome cousin e komo maiAloha, e komo maiCuando acabó la canción todos se reían a carcajadas, ya que Adrienne había hecho la imitación perfecta de Stitch mientras que cantaba la canción, poniendo muecas divertidas, mientras imitaba al personaje de Disney. Todos se miraron por un momento y volvieron a reír todos juntos, como una familia, la familia en la que se habían convertido.

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