FanReals: Dos y un Solo Corazón

Esta Historia tiene una novedad....tiene dos finales a opcion del lector....lean el que mas les guste....y disfrutenla como yo escribiendola...con todo el respeto para todos los personajes que salen en ella....espero comentarios.....

DOS Y UN SOLO CORAZON
(Por LadyAxR)

Me senté en el sofá, agotada del viaje, mire a mi alrededor, había frente a mi una chimenea con unos pequeños juguetes encima de ella, probablemente del inquilino anterior, pues el matrimonio que me había alquilado esa cabaña de madera me había comentado que la alquilaban de vez en cuando. También me contaron una historia que circulaba por el pueblo, una leyenda urbana de que por el bosque cercano a la cabaña se aparecía una niña, algo que no creí y que me hizo mucha gracia, yo siempre he pensado que uno no ve si no quiere.

A mi izquierda había un sillón y a mi derecha otro igual, todos los muebles de la casa eran de madera y la verdad a pesar que parecían incómodos no lo eran, lo notaba por donde me encontraba sentada. En las paredes del salón se encontraban colgados unos cuadros de paisajes invernales. Aun no había sacado mis pertenencias del coche y debía hacerlo, la noche se acercaba y el frío también. Antes de revisar toda la cabaña, salí y vi como los árboles que había alrededor de la cabaña comenzaban a bailar por el viento frío. Saque todo de mi coche y lo coloque en el salón. Prefería calentar antes la cabaña que ponerme a deshacer mis maletas, así que fui al pequeño cobertizo donde me habían indicado que había leña almacenada, estaba justo en la parte trasera de la casa, al igual que divise un lago hermoso, en el cual había una barca atada en un pequeño puente, para pasear y divertirse en el agua, en la mañana lo probaría. Traje bastantes troncos para pasar la noche y encendí la chimenea, dejando ardiendo los leños cogi mis maletas y subí a la parte superior de la casa, ante mi había un pasillo donde vi a mi izquierda un par de puertas y a mi derecha tres puertas mas, como no conocía la casa deje las maletas en el pasillo y camine entrando una a una las habitaciones para ver donde podía instalarme.

Las habitaciones de mi izquierda eran dos dormitorios con ambas camas de matrimonio y en una de ellas tenia un cuarto de baño incluido. Las habitaciones de mi derecha eran dos dormitorios mas, una con cama matrimonial y la otra con dos camitas separadas por una mesita de noche, en ese último dormitorio también había un cuarto de baño incluido, la otra puerta pertenecía a un baño completo. Decidí instalarme en el dormitorio de ambas camitas, la vista era preciosa y era la única habitación de la casa que tenia balcón con vistas al lago.

Después de deshacer todo mi equipaje y ordenar todo, baje abajo para ver la cocina, que cuando llegue me parecía preciosa, no muy grande pero muy bonita, menos mal que había merendado tarde por que no había nada en ella, así que me senté nuevamente en el salón delante de la chimenea y de mi bolso saque una pequeña libreta para escribir todo lo que debía comprar en la mañana. Mientras hacia la lista pensaba en mis hijos, lo había dejado con mi madre, al principio no me gustaba la idea, era la primera vez que me separaba de ellos, pero quise hacer ese viaje y pasar un mes sin tener contacto con nadie, para olvidarme de todo el stress que me ocasiono estar trabajando sin parar tanto tiempo. Fue algo que el medico me recomendó cuando acudí a su consulta, después de que una semana atrás me diera en el trabajo un desmayo por todo lo que pasaba en mi vida. Mi trabajo, mi familia, mis amigos, y como no, ella, ella que siempre estaba hay, que me martirizaba en amarla tanto y no ser correspondida. Este mes de vacaciones me vendría muy bien, así que lo disfrutaría al máximo. Deje de escribir la lista y saque de mi bolso mi teléfono debía decir que había llegado bien.

- ¿Mama?
- Hola hija, ¿como estas?, ¿como llegaste?
- Bien madre, gracias, todo me fue muy bien, ya sabes solo estamos a cuatro horas
- Que bueno, me alegro, ¿y la cabaña que tal? ¿Como esta el lugar?
- Pues no lo he visto mucho la verdad, por que se me hizo de noche, pero algo vi y este lugar es maravilloso, mucho frío pero maravilloso
- Normal hija, te has subido casi al pico de una montaña jaja
- Ala que exagerada eres madre jaja, en fin, ¿como están mis hijos? ¿Te han dado mucha lata?
- No, ya sabes, son angelitos, están bien, no te preocupes por ellos, tu lo que tienes que hacer es descansar y disfrutar el viaje
- Si, eso pienso hacer, necesito recargar baterías
- Hoy te han llamado varias personas, entre ellos Lucy, quería saber que…
- Madre no, no me digas quiero descansar y pensar en mi, ya no deseo pasarlo mal
- Como quieras hija
- Bueno oye, te dejo…mañana te llamo para hablar con los niños, cuídense mucho, besos
- Igualmente tesoro, hasta mañana

Decidí acostarme quería descansar, después de un baño caliente, y de cerrar todas las puertas con sus cerrojos, subí a mi habitación metiéndome rápidamente en la cama para calentarla, la chimenea había estado poco tiempo y hacia algo de frío. Mi ordenador portátil lo tenía cerca de mi cama, lo miraba, no quería conectarme, pero pudo mas el saber quien estaba conectado de mis amigos en el msm. Lo encendí y entre, como no conectado, solo quería saber quien estaba, por pura curiosidad, aunque mi medico me prohibió llevarme el ordenador en este viaje, pero era evidente que no le había hecho caso. Había varias amigas mías, Alex, Adri y algunas mas suelta por hay, mientras observaba, entro Ted, el me mando mensaje, no quería, es mas no debía contestarle pero lo hice.

T: Hola amiga, ya me entere el otro día de lo ocurrido, espero este bien y podamos pronto hablar
R: estoy bien gracias…como te va a ti
t: holaaaaaaaaaa que gusto encontrarte
r: igual, pero no por mucho
t: ¿y eso?, que te paso ren, me dijeron que te pusiste muy mal
r: si la verdad si, pero ahora estoy perdida en una montaña y me pienso pasar unos días de vacaciones, recomendación del medico
t: si es normal, yo siempre te lo he dicho, que debes descansar que pasas muchas horas trabajando
r: hey hey no me riñas tu también, si ya lo se y lo voy a hacer a partir de ahora
a: heyyyyyyyyyy te llame a tu casa y tu madre me dijo que te habías ido, estábamos precisamente hablando Adri y yo de ti -. La ventanita nueva abierta era Alexandra, le conteste
r: Alex, estoy con Ted, vamos a ponernos juntos los cuatro que si no me volveré loca entre todos-. Así lo hice las invite a la conversación
Ad: preciosa como estas y donde, por que me han dicho que te has largado
r: es increíble chicos como vuelan las noticias jaja
a: bueno, nos preocupamos por nuestra amiga, es lógico
r: gracias amigos, os lo agradezco de corazón pero estoy bien, solo necesito descanso y en un mes estaré repuesta
t: guapas ren nos a abandonado y no nos quiere decir donde esta
Ad: y eso por que ren, ya no nos quieres
r: jaja no es eso, es que el medico me ha dicho que necesito estar tranquila, es mas ni debería estar chateando jaja, así que ya os dejo
a: noooooooooooo espera

Vi como me aparecía la conexión de Lucy, y ellos querían seguir hablando, me negué, me pareció incorrecto pero me desconecte y cerré el ordenador, no quería seguir hablando y mucho menos con ella. Era mi amiga y mis amigos y los extrañaba pero no podía en esos momentos, no debía. Me costo mucho pero conseguí dormí.

El día me despertó y el sol entro por mi ventana, me levante y baje rápidamente a encender la chimenea, debía calentar la casa. Después de asearme me vestí con ropa abrigada y Salí de la cabaña, conduje hasta el pueblo y compre todo lo necesario para no salir en un mes. Llegue a la casa muy cargada pero en dos horas todo lo coloque en su lugar y me dispuse a disfrutar mi estancia en ese bello lugar.

Los días pasaron y en soledad pensé mucho, en toda mi vida, en lo que hacia, en lo que quería hacer en mi futuro, comencé un diario, para escribir todas mis vivencias en ese lugar, todos mis sentimientos, mis desilusiones de la vida y mis alegrías. Pasee por el lago, camine por el bosque lleno de árboles, y tome fotografias y video de la nieve que a veces caía y del lago. A veces chateaba en las noche con mis amigos pero no lo hacia mucho solo lo necesario. Después de diez días me sentía muy bien, alegre y repuesta de todo, caminando hacia la barquita me monte y como cada día pasee por el lago, al otro lado había una pequeña isla, nunca me había acercado hasta ella pero ese día fui, cuando llegue desembarque y camine por ella. Vi una casa, nunca la había visto, me acerque y pregunte.

- Hola, ¿hay alguien?
- Hola-. Un hombre alto, cabello moreno, buena presencia, ojos oscuros salio de la casa
- Hola, solo deseo pasear por su propiedad espero no sea ningún impedimento-. Le dije avergonzada, no me esperaba que alguien me contestara
- Claro, no hay problema, usted es mi vecina de enfrente ¿cierto?
- Si, hace un…
- Si lo se, lleva ya varios días, la vi cuando llego y como se pasea usted todos los días por el lago
- Si, la verdad no sabía que tenía un vecino, lo siento-. Me acerque a él-. – Me llamo Renee
- Encantado, yo me llamo Rick-. Me dio su mano mientras sonreía, salio una mujer mayor y una más joven-. – Y estas son mi madre Bárbara y mi hermana Ángeles
- Es un placer
- Igualmente-. Se acerco la madre mientras detrás se quedaba su hermana
- Bien, creo que es mejor que me marche, se esta haciendo tarde y…
- Por que no te quedas a cenar-. Propuso Bárbara-. – Estamos haciendo carne asada y estaríamos encantados que te quedaras
- Bueno...es que debo…además no quiero molestar
- Vamos, somos vecinos, no serás una molestia

Decidí quedarme, me caía bien esa gente, era una familia buena, viuda la señora no hacia mucho, su hijo se la había traído a esa cabaña para tratar de superar su dolor, su hermana, joven y guapa estaba enganchada a su teléfono en todo momento y Rick era un hombre cariñoso el cual durante toda la cena estuvo pendiente de todas nosotras. Durante la cena nos fuimos poco a poco conociéndonos Rick, abogado, soltero, 35 años. Su hermana Angeles, 20 años, estudiante de periodismo y sin novio. Bárbara, 60 años y buena madre para sus hijos. Yo les conté de mis hijos y que vivía sola desde mi divorcio aunque mi madre me ayudaba muchísimo.
Bárbara le propuso a su hijo acompañarme, me hizo gracia, la señora amable pero quería que su hijo estuviera conmigo, pensé que eso era lo clásico, la madre que deseaba buscarle novia a su hijo. Algo que mi madre siempre hizo también, aunque dejo de hacerlo cuando le hable claro y le conté de mis sentimientos por mi amiga. Salimos de la cabaña y llegamos a la mía después de atravesar el lago.

- Bueno Rick, gracias pos acompañarme
- Por nada Renee, espero verte nuevamente y siento la insistencia de mi madre ya sabes como son-. Me sonrió
- Si tranquilo jaja, es algo muy común, no te preocupes, me ha gustado mucho conoceros, a mi también me encantaría veros nuevamente, que os parece si mañana vienen y les invito a comer aquí
- No, no te preocupes, no queremos….
- En serio, lo digo de verdad, vénganse…a las 2 estaría bien, tendré lista una comida para cuatro ¿vale?
- Bueno…buenas noches, que descanses
- Gracias igualmente-. Le bese la mejilla

Cinco días habían pasado rápido, apenas me conecte con mis amigos y familia, solo para saber de mis hijos, estaba feliz, no podía negarlo pero el conocer a esa familia me había dado mucha satisfacción. Bárbara era una mujer encantadora y me ayudaba mucho, Angeles y yo nos hicimos muy amigas y me confeso que estaba por un chico que su madre no aprobaba y lo tenia a escondidas, que lo amaba y que deseaba casarse y hacer su vida junto a él. Al principio la apoyaba a ella, pero cuando me entere de la profesión del chico que no era muy buena trate de quitárselo de la cabeza, aunque lo paso mal, nos hizo caso a su hermano y a mí que con consejos lentamente se lo fue sacando de la cabeza. Y Rick era un encanto, nunca imagine sentir nuevamente por un hombre así, pero él lo consiguió, me hizo sentir y me hizo olvidarme de muchas cosas del pasado. Estaba feliz, me sentía dichosa.

- Renee, ¿mañana que vas a hacer?-. Me preguntaba Angeles sentada frente a mi en el porche de mi cabaña, a mi izquierda estaba Rick junto a su madre, tomábamos una copa
- La verdad no mucho, ¿por que?
- Hey vamos, debes hacer algo, es tu cumpleaños-. La mire fijamente interrogándola con la mirada-. – Espero que no te moleste pero lo mire en Internet
- Ah, vaya, ¿averiguaste sobre mi trabajo?
- Bueno, algo, perdona pero….
- No, tranquila no me importa, si, es mi cumpleaños-. Los mire a todos-. – Pero no deseo hacer nada
- ¿Pero como no vas a celebrarlo?-. Bárbara pregunto-. – Hija, todo los años se debe dar gracias a Dios por vivir un año mas
- Si, lo se señora, pero es que no tengo muchos ánimos-. Seguía mirándolos, era cierto lo que ella me decía, debía celebrar, era mi día y esa gente me había dado mucho en poco tiempo de conocerlos-. – ¿Saben que?, es cierto, tiene razón, que les parece una comida o….
- ¿Sabes que?-. Intervino Rick-. – Tu no te preocupes de nada nosotros te haremos la fiesta, vamos a hacer que pases un día maravilloso, inolvidable ¿dea cuerdo?

La copa se acabo y ellos se marcharon, Rick fue el primero que me felicito recién pasada las doce de la noche, me beso, me abrazo y seguidamente su madre y hermana hicieron lo mismo. Cuando ya se marcharon a su cabaña, me bañe antes de acostarme, estando en la bañera, pensé en Rick y luego en Lucy, mi cabeza estaba entre dos rostros, entre dos personas. Nunca quise enamorarme de Lucy, pero lo hice, sin quererlo ella me robo el corazón, pero ahora Rick, entro en mi vida y me gustaba, lo sentía cariñoso, bueno, amable y sincero. Lucy nunca me había dicho una palabra sobre nada, y yo nunca le dije nada, si me insinué en el pasado, pero ella reacciono alejándome, yéndose con su familia y yo quede sola y solo con su amistad. Debía pensar en mí, debía tener una vida, Rick parecía interesado en mí.

Salí del baño y me conecte, en mi correo había mensajes de mi madre, amigos y mis fans que nunca me olvidaban. Entre al Messenger, quería ver quien había conectado, al entrar un mensaje instantáneo de Lucy apareció.

Querida Renee, hace mucho que no se nada de ti, espero estés bien y que lo estés pasando bien, que decirte al cabo de tanto tiempo amiga….te extraño y mucho, son las doce y pensé estarías conectada para felicitarte, como no lo estas te dejo aquí mis felicitaciones y te deseo toda la felicidad del mundo, que cumplas muchos mas, y yo que pueda pasarlos junto a ti como cada año.
TQM
Lucy

Lucy, siempre ella, a pesar de la distancia, sentía un amor profundo por ella, y Rick… ¿pensé en él?.... ¿en su sonrisa?...a lo mejor estaba sintiendo cosas nuevas, sentí que mi corazón traicionaba a Lucy, pero no debía ser así. Vi la conexión de Lucy.

L: hola pequeña, ¿como estas?-. No le conteste, quede callada
L: estas?-. Miraba la pantalla
L: Bueno te deseo todo lo mejor, decirte que te llevo en mi corazón y que te quiero mucho…estas por hay?-. Mi mente decía que no le contestara y mi corazón que si, veía sus palabras y mis dedos querían andar y hablarle pero si lo hacia volvería a caer
L: amiga?
R: Hola…como estas?, yo bien-. Caí, le hable, fue inevitable
L: Holaaaaaa, que bueno que me contestas, estabas ocupada?, feliz día cumpleañera
R: Gracias amiga, si acabo de llegar del baño-. Le mentí-. – como están tus niños y todo?
L: Bien gracias
R: Lucy debo dejarte, es que solo entre e revisar correo y debo dormir estoy cansada
L: Ren…te pasa algo conmigo?, por que se que has hablado con otros y conmigo no-. No le conteste, me Salí, desconecte

Me acurruque en la cama, mis lagrimas salieron, la amaba y sufría por ello, ya no aguantaba mas, quise alejarme, ya no la quería como amiga, me lastimaba, ya no podía, ya no quería, me desesperaba pensando y sintiendo este lío en mi cabeza.

Al día siguiente desperté con un sonido…me asome a la ventana, estaba Rick con un ramo de flores y tocando una guitarra, cantando una canción, me sonreí, me hacia gracias verlo en esa situación, abrí la ventana y escuche su canción. Baje escaleras abajo y lo abrace mientras él nuevamente me daba la felicitación. Lo mire a los ojos, su brillo me gusto, su mirada me fascino, pero me aleje.

- Eres un loco jaja, como se te ha ocurrido esto?
- Es la primera vez que lo hago jaja, espero no te hayas asustado de mis gallos jaja
- No…estuvo bien jaja. Ven pasa-. Le indique dentro de la casa-. – Desayuna conmigo, y tu familia?
- Se quedaron en casa, anda preparando cosillas-. Me guiño un ojo-. – Debo sacarte de tu cabaña durante un par de horas
- Vaya vaya, que se os a ocurrido?....en fin da igual, si es así, vamonos, me encanta las sorpresas…a donde debes llevarme?
- Donde quieras tú-. Se bebió su café y se levanto de la silla acercándose a mi
- Esta bien-. Me aleje-. – Subo a vestirme y nos vamos al pueblo-. Me avergoncé, sentí un escalofrío por mi cuerpo

Después de dar vueltas por el pueblo, pasear por el bosque llegamos nuevamente dos horas y media después a mi cabaña. Desde lo lejos divise globos de muchos colores, dentro de la casa estaba toda con adornos y la mesa llena de comida, de todo tipo, hasta mi plato favorito estaba…probablemente sacado de Internet también por Angeles. Las dos salieron de la cocina de golpe, felicitándome y me abrazaron dándome obsequios. Riendo todos nos sentamos a comer, en medio de la comida, escuchamos ruidos fuera, Rick se levanto y se asomo a la ventana.

- Invitaste a alguien Renee?-. Me miraba sonriendo
- No, por que?-. Sorprendida no me imaginaba, nadie sabia donde estaba a menos que…solo mi madre sabia donde, me levante y me acerque a la ventana, mi visión sorprendida y emocionada, Salí corriendo.

Cuando abrí vi dos coches, en ellos estaban mis amigos, Alexandra, Ted y Adrianne, en el otro mi madre he hijos, corrí feliz hacia ellos, los abrace, me los comí a besos, necesitaba de ellos, a pesar de que en este lugar me sentía feliz pero no podía negar que los necesitaba a todos ellos.

- No creerías que este año podrías alejarte de nosotros o librarte verdad?-. Ted dándome un gran abrazo
- Gracias por venir en este día amigos, os extrañe mucho, cariño-. Cogi a Iris en brazos-. – Como estáis? Habéis crecido en mi ausencia preciosos, madre-. Me acerque a abrazarla
- Felicidades hija, como te sientes?
- Muy bien, gracias, me has hecho la mujer mas feliz del mundo, gracias por venir….Chicas?-. Mire a mis amigas, me acerque y las abrace-. – Estáis locas, como disteis conmigo?
- Bueno, obligamos a tu madre a decirlo-. Reía Alex
- Pasad dentro-. Les señale la entrada, gire mientras llevaba en brazos a Iris, escuche un sonido de un nuevo coche, me volví a mirar, era ella, Lucy llego con sus hijos, se bajo del coche
- Yo puedo unirme también?-. Me sonreía con su sonrisa encantadora, vistiendo unos vaqueros ajustados, con camisa negra, estaba hermosa, preciosa
- Dios…pero…esto es de locos-. Le sonreí, me alegraba tenerla hay, no podía negar que me encanto su presencia-. – Como es posible que todos hayáis venido?
- Ya ves….los amigos están para eso, nunca se abandonan-. Se acerco y me beso seguido de un abrazo que tardo en acabar, mientras me felicitaba, yo la miraba mientras le hacia cariños a Iris, veía su mirada azul, tierna, encantadora, amable. Me miro…-. – Ren, te he extrañado
- Yo también a ti-. Mi mirada sostenía la suya, de ese encuentro nos saco su hija
- Reny…feliz día preciosa-. Me abrazo
- Gracias Day, como estas?
- Bien, cansada pero bien…nos dices donde…
- Si claro, a ver, vengan conmigo debo colocarlos en la casa, no se como hacerlo jaja pero lo vamos a conseguir

Ellos cuando entraron no se esperaban que estuviera acompañada y fue una sorpresa para todos, tanto por un lado como por el otro. Gracias a Dios todo salio bien después de las presentaciones, los coloque en sus habitaciones, Alex y Adrianne en una habitación, Lucy y sus hijos en otra, mi madre junto a mis hijos en la habitación contigua a mi y a Ted lo iba a poner en la cama que sobraba en mi cuarto, pero él prefirió bajarse en la noche el colchón al salón. Sentados a la mesa acabamos de comer. Después de comer los niños salieron a jugar junto con Daisy, no los quería solos y ella me hizo el favor. El resto seguíamos dentro tomando café y me seguían mis recién llegada familia y amigos dándome regalos que yo los abría feliz. Jamás pensé sentir toda esa felicidad enorme pero así me sentía, contenta y mi corazón rebosaba de alegría. Decidimos descansar en la tarde para retomar la celebración en la noche.

- Renee, hija, ese Rick…bueno…
- Madre, ya, no es lo que crees, él solo es un buen amigo-. Le decía mientras arropaba a mi hijo en la habitación asignada a mi madre, Iris ya dormía en su lugar
- Pero….
- Ya madre, y ahora por que no me cuentas lo ocurrido?, por que ha venido ella?, por que….
- Cariño, antes de que me acuses escúchame….es que llego a casa Alex cuando yo ya me estaba montando en el coche para venir a verte y…bueno…ella…me pidió el favor… cariño, son tus amigos
- Ya lo se, no estoy enfadada ni nada de eso, me a encantado que vinierais, pero ella?, por que?, por que ella?
- Yo no le dije nada, se presento con ellos y…lo siento hija, pero…que iba a hacer….no podía decirle nada, tu me dijiste que jamás hablara nada y…en fin…yo….
- Bueno mama, ya, dejémoslo y disfrutemos, descansa, luego nos vemos
- Vale cariños-. Se acerco a mí-. – pero quiero decirte que te quiero mucho y que te extrañaba, me da mucha alegría verte bien, y tus hijos ya querían verte
- Y yo a ellos-. La besa-. – venga nos vemos luego

Salí del dormitorio, baje al salón, Rick y su familia aun no se habían ido, los vi sentados frente a la chimenea conversando con Ted y Lucy. Me agregue a ellos y acabamos un segundo café, hablando y riendo.

- Bueno ya es hora de irnos, vamos madre-. Decía Rick mientras se levantaba
- Les acompaño-. Me levante al igual que él
- No Renee, no te preocupes, yo….
- Quiero acompañaros, vamos que os llevo en mi barca
- No es problema en serio
- Ren tranquila que ya se van ellos, no tienes por que acompañarlos-. Dijo Lucy sonriendo y mirándome de forma desconocida para mi
- Pero yo deseo hacerlo-. Le decía mientras agarraba mi abrigo-. – Vamos…-. Les indique con mi brazo, lo cual Angeles muy a su pesar ya que estaba muy a gusto con Ted conversando se retenía y Bárbara se levanto siguiendo mi gesto.

Los lleve hasta su casa y me despedí de Bárbara, de Angeles que me pregunto por Ted, estaba interesada por saber si tenia a alguien en su vida, cosa que negué ya que él se había separado dos años atrás sin hijos que Ted deseaba, ella se alegro de esa noticia, pensé en que seria una gran elección para Angeles. Ted era una gran hombre y lo que ella buscaba estaba en él, hacían una gran pareja a pesar de la edad que les distanciaban.

- Bueno Renee, nos vemos en la noche, no te preocupes por venir a buscarnos, iremos con nuestra barca
- Gracias pero si quieres vengo a buscaros
- No tranquila no hay problema….-. Me miro en silencio-. – Es ella?
- Ella?...no te entiendo Rick
- Sabes de que te hablo Renee, es ella ese amor que me contaste que no puedes olvidar ¿verdad?, dime la verdad, yo….yo….estoy enamorado de ti y me haces sentir otro hombre, me haces feliz, pero no deseo interponerme entre tu y el amor de tu vida

Quede perpleja ante su confesión de amor, en ese justo momento, en…era cierto, él se dio cuenta y me sentía culpable, no quería dañar a ese hombre maravilloso que me había encontrado. Anteriormente en una de nuestras conversaciones le había hablado de un amor no correspondido, pero jamás pensé que él se diera cuenta de que era ella nada mas verla….


PRIMER FINAL

- Rick, no es lo que piensas en serio….ella fue alguien importante pero…han ocurrido cosas en mi vida que no quiero dejar atrás
- No quiero explicaciones Renee, no debes ni tienes por que dármelas, solo quiero y deseo que seas feliz, decide tu camino, yo iré en él sea para bien en mi vida o no
- Gracias, eres un amigo, gracias por todo-. Me despedí de él dándole un abrazo de oso

Marche en mi barca nuevamente, al llegar a casa en la orilla estaba Ted, ate la barca, llegue hasta donde el estaba.

- Llegasteis bien
- Si
- Como estas Ren?
- Bien
- Estas diferente a como eres, puedo saber por que?
- Bueno….yo…
- Siempre fui tu amigo, te ayude en momentos difíciles al igual que tu a mi, pero noto en tu mirada, en actitudes que ya no es así, ¿por que amiga?
- Ted, estoy cansada podemos hablar en otro momento
- Ella te quiere, no lo olvides, muere por ti-. Me decía mientras yo camine sin mirar atrás

Entre en casa, subí a mi dormitorio y quede en mi cama mirando al techo, sin pensar, solo deseaba descansar, no se cuanto tiempo dormí, pero debió ser mucho pues cuando abrí mis ojos sentí jaleo debajo de la cabaña, se escuchaba muchas voces, ruidos y risas. Me arregle con rapidez pero bien y bajando la escalera me alcanzo Daisy, saludándome con un abrazo y beso, bajamos juntas, la casa estaba llena, mis hijos junto a los de Lucy jugaban en el salón, mi madre y la madre de Rick en la cocina, unos entraban y otros salían. Salude a los niños y jugué un poco con ellos. Salí a caminar, en el porche estaba Ted junto a Angeles conversando.

- ¿Donde vas preciosa?-. Se acerco Ted saludándome
- A pasear un rato, quiero estar un ratito sola para pensar… ¿y ustedes?, se les ve bastante bien junto eh…-. Les sonreí a ambos, si, hacían buena pareja
- Renee ¿quieres compañía?-. Una avergonzada Ángeles me miraba
- No tranquilos, disfruten su charla, no tardare en volver, adiós

Camine hacia el bosque, paseaba por el sendero, me gustaba ver los árboles moviéndose, me relajaba, tranquilizaba mis nervios y mi cabeza se calmaba según caminaba, escuche ruido detrás de mi, gire viendo a Rick acercarse.

- Hola, ¿como estas?, ¿preparada para tu fiesta?
- Si gracias
- ¿Que haces por aquí tan solita?
- Ya ves…paseaba, Rick…yo…
- Escucha Renee, no me digas nada, yo…bueno….ya sabes lo que siento por ti, no he podido evitar enamorarme de ti, eres un ser humano maravilloso, una gran mujer que me ha hecho sentir un amor puro y bueno. Pero solo deseo tu felicidad….y si con ello debo perderte…lo aceptare, pero no me dejes sin tu amistad
- Rick, eres una persona amable y buena-. Me acerque cojiendome de su brazo y caminando-. – Ojala te hubiera conocido antes de…
- Ella….Lucy, no la conozco mucho pero se ve buena persona y te digo algo, ella te ama Renee, díselo, háblale, te ama mas de lo que piensas
- No se, jamás me ha dicho nada que fuera algo mas allá de una simple amistad, no quiero arriesgarme a perderla como amiga
- Cariño, Renee-. Se detuvo, su mirada se clavo en mi-. – Díselo, he visto como te mira, solo tiene miedo, pero te ama de eso no me quedo ninguna duda, estoy seguro que si tu la animas ella te va a aceptar

Mientras caminábamos camino a la cabaña me aconsejo mucho y me ayudaba con mi contrariedad, sentía tristeza por él, ojala pudiera darle el amor que él se merecía pero no, no podía.

- ¿De donde venís?....ya veo…que Rick, ¿dándole tu regalo lejos de nosotros?-. Lucy se acerco a nosotros, su hija la seguía
- Madre…no creo….
- Cállate…estábamos preocupados, ¿donde estabais?
- Lucy por favor, no creo que debas actuar de esta forma solo por que Rick y yo estábamos….no encontramos en el camino del bosque pero…-. La miraba, no tenia por que disculparme, ella no tenia derecho sobre mi-. – Sabes no te voy a dar explicaciones, soy libre para hacer lo que quiera
- Si y ya veo que no has perdido el tiempo, es buena ¿verdad?-. Miro a Rick
- Lucy, no hables así de Renee, ella siempre….
- Ya…-. Grite-. – Lucy deja de decir cosas absurdas, él es solo un buen amigo, además me da igual que lo creas o no, ni te voy a explicar nada, cree lo que quieras, vamos Rick-. Seguí caminando junto a él.

La fiesta no salio como esperaba, había tensión entre ambos, Lucy se marcho pronto y él igual hizo junto a su familia, y mi cabeza me explotaba. Parecía mentira pero deseaba estar un poco tranquila…..llegue al lago y camine, hacia mucho frío, era de noche pero mi espalda me mataba de tensión, así que me desnude y me tire al lago a nadar, que hice muy bien pues sabia hacerlo pero algo me impidió llegar a la orilla nuevamente una red, algo, la verdad no sabia que…pero me empecé a hundir hacia abajo, tiraba de mi, muy fuertemente, me asuste, trataba de salir, pero iba hacia abajo sin remedio, hasta que sentí lo que era, brevemente visualice lo que era…..Lucy.

Me arrastro bajo el agua hasta un apartado lo cual yo me negaba pero era imposible tenia mas fuerza que yo, llegamos donde ella se detuvo y me retuvo sacándome del agua a la orilla en la oscuridad de la noche. Sus manos aprisionaban las mías encima de mi cabeza, me miraba.

- Dame lo que le has dado a él, quiero sentirte, quiero amarte-. Me decía llorando, quede en silencio, no pude reaccionar, no me esperaba eso-. – Dime por que te has entregado a él cuando yo te he amado tanto, cuando solo esperaba una palabra para decidirme y comenzar una nueva vida contigo, por que?, por que Ren?-. No pude contestarle estaba bloqueada, jamás pensé que esa situación me pasara-. – Habla-. Me grito, su llanto seguía
- Lucy…estas reteniéndome contra mi voluntad…suéltame-. Trate de hacerlo, no me lo permitió
- No-. Me grito-. – No, dime por que, por que, me has dejado de…
- De que?-. Le grite-. – De que?
- De amarme, maldita sea, de amarme-. Sus lagrimas cayeron en mi pecho desnudo
- ¿Por que das por hecho que he dejado de amarte?-. Mis lagrimas brotaron de mis ojos, me sentí morir, no podía negar mi amor hacia esa bella mujer
- Por que he visto como lo miras, por que me he fijado en como le sonreís por que le has dado….
- Nada…no le he dado nada, no te voy a negar que he sentido algo, pero nunca como lo que siento junto a ti
- ¿Es él mas que yo?, dime… ¿es mas que yo?... ¿con quien sueñas amor?.... ¿es en él en que piensas cuando estas conmigo?....cuéntame la verdad, dime, cuéntame….
- Lucy…nunca he estado contigo, tu me has dejado, ni sabes lo que te añoro, ni sabes lo que te amo, si, te amo, te quiero, siempre lo he hecho mientras tu me has negado, y sabes algo, quiero aunque sea tu amor una noche….dámelo….por que al fin me ha llegado tu amor esta noche….

Esa noche de mi cumpleaños al final para mi será siempre inolvidable por que nuestro amor fue consumado con pasión, con alegría y aunque con tristeza para mi amigo Rick. Él cuando le conté lo ocurrido se alegro por mí y me acompaño hasta el altar, siendo mi padrino de bodas ya que conseguí casarme en San francisco junto al amor de mi vida, y su nombre es…. Lucy.

Final Primera Parte

Final Segunda Parte

- Rick, no es lo que piensas en serio….ella fue alguien importante pero…han ocurrido cosas en mi vida que no quiero dejar atrás
- No quiero explicaciones Renee, no debes ni tienes por que dármelas, solo quiero y deseo que seas feliz, decide tu camino, yo iré en él sea para bien en mi vida o no
- Gracias, eres un amigo, gracias por todo-. Me despedí de él dándole un abrazo de oso

Llegue nuevamente a la cabaña y vi a Ted, esperándome, mientras desembarcaba me hablo, me preguntaba por mi nueva situación, que me veía diferente, que irradiaba felicidad.

- ¿Es él amiga?, Rick te hace sentir así de bien ¿verdad?-. Me paso su brazo por mis hombros mientras me encaminaba hacia el bosque-. – Amiga, ¿paseamos y conversamos?
- Vale, caminemos, realmente lo necesito, necesito hablar con un buen amigo como tu

Estuvimos un rato conversando, Ted me interrogaba, me pregunto todo y yo le conté mis sentimientos, no podía seguir callando todo lo que me pasaba por la cabeza, el lío que sentía. Ted no pareció muy sorprendido cuando le confié mi amor hacia Lucy, pero si al saber mis sentimientos hacia Rick. Le pregunte el por que, y su contestación fue simple.

- Jamás pensé que tu amor por ella se fuera apagando-. Lo mire de frente, él me sonrió
- Ted, no se apago mi amor, pero no puedo esperarla por toda mi vida, necesito ser feliz, necesito vivir
- ¿Has hablado con Lucy?
- No, ¿estas loco?, no, ella….bueno….ella jamás me ha dicho nada y yo nunca he querido hacerlo
- Ren creo que deberías hablar con ella…te llevarías una grata sorpresa
- Por que?, tu sabes algo que yo no?...no, esto es una locura, dejémoslo amigo, vayamos a la casa

Me insistió y me aconsejo que no decidiera nada antes de hablar con ella, que le diera la oportunidad que merecía. Corte el tema cuando entramos en la cabaña, subí a descansar, pero no me fui a mi dormitorio me fui donde estaba mis hijos, me abrace a ellos y quede dormida. Desperté y estaba sola en la cama, escuche ruidos abajo, me vestí rápido y baje, la continuación de la fiesta había comenzado, mientras bajaba por las escaleras mire en el salón a mis hijos jugando, entre a la cocina, estaba llena, mi madre conversaba con Bárbara y Lucy junto a Adrienne preparaban un plato de comida.

- Hola a todas, ¿que pasa la fiesta empezó sin mi?
- No cariño-. Mi madre me dio un beso sonriéndome-. – Como va a empezar sin la cumpleañera eso es imposible
- Que bueno madre, por que pensé que ni me extrañaron un poquito
- Como no extrañar tú presencia que eres maravillosa e irradias felicidad por todos lados-. Añadió Bárbara-. – Renee, mi hijo esta fuera y….
- Ya acabe-. Dijo Lucy dándose la vuelta y mirándome, me mostraba en sus manos un pastel-. – Amiga, feliz cumple, espero te guste la tarta que te hicimos Adri y yo-. Se acerco para que la viera bien, pero yo la mire a ella, su mirada fija en el pastel me demostraba tristeza
- Gracias-. Solo dije eso y Salí de la cocina, tenía ganas de llorar, me sentía culpable, me sentía mal.

Sin mirar a nadie Salí de la cabaña y camine y camine, quería pensar, me estaba volviendo loca toda la situación. Ted me había dado a entender que Lucy quería algo mas conmigo y su mirada me demostró algo que nunca había visto en ella. Rick me había dicho sus sentimientos y mi mente no sabia que decidir. Volviendo del paseo escuche voces, Lucy hablaba con Rick.

- No esta bien que le hagas eso Lucy, esta discusión que estamos teniendo es algo ilógico
- ¿Yo?, ¿que le hago yo?, tu eres el que estas interfiriendo en su vida, tu eres el que has entrado y le has dicho y la has cambiado. Mira Rick, me parece un buen hombre, no te conozco lo que debería, pero….si la vas a hacer feliz yo me quito de en medio y ahora mismo me voy
- Yo deseo su felicidad tanto como tu, y por desgracia para mi ella te ama a ti, hazla feliz, no la hagas sufrir
- Yo no la hago sufrir Rick, tu eres el que…
- Ya…-. Me acerque a ellos, intervine, parecían dos tontos luchando por un caramelo-. – Os estáis comportando mal, escuchadme ambos, los dos sois mis amigos y no me parece bien que estéis regalándome como si fuera un trofeo
- Pero Ren…yo…-. Lucy avergonzada
- No…callarse ya…dejadme en paz, no soy de nadie y no quiero que nadie me haga feliz ni nada, yo voy a decidir mi vida y sabéis que…no os quiero a ninguno de los dos. Me he dado cuenta que el amor me ha dado nada mas que problemas, he decidido vivir sola y en paz

Sin mirar atrás me marche, camine hacia la cabaña, escuchaba que me llamaban pero no, me había decidido, solo quería vivir en paz sin tanto quebradero de cabeza….y eso era lo que el amor me había traído a mi vida.
Rick no se quedo al final a la fiesta, se marcho, Lucy tampoco convivió en mi cumpleaños y fue el peor de mi vida. Me sentía morir….al dia siguiente Lucy desapareció sin despedirse…yo volví a mi casa junto a mis hijos, nuevamente comencé con mi trabajo y mi vida siguió adelante.

Hoy me siento feliz un año después…es cierto que los extraño a ambos, no perdí contacto con ninguno, son mis amigos y lo seguirán siendo siempre, siento su lejanía, pero es mejor así, mi vida es mas tranquila al dia de hoy. Sin pensar en nadie mas que en mis hijos y en mi. Dentro de una semana debo encontrarme con ambos, se realiza la boda de Ángeles y Ted.


Final Segunda Parte

FanReals: Necesito Respuestas

NECESITO RESPUESTAS
(Por LadyAxR)

No podía creer lo que me estaba pasando, mi primer día y llegaba tarde, en otras ocasiones que había llegado tarde si era por mi culpa pues me quedaba siempre durmiendo hasta tarde haciendo cosas, me encanta la noche y la relajación que ella me proporciona. Pero ahora al ser mi primer día de trabajo me había levantado temprano, pero mi coche no quería llegar. Ese mismo día iría al mecánico, no era posible que el día anterior me lo entregaran y que ya me fallara. Mataría a quien me lo hubiera arreglado, ¿arreglado?, mejor pensado me lo habían dejado igual.

Mi coche no era ultimo modelo, y no por que mi madre no me hubiera ofrecido ayuda para comprar uno nuevo, pero no podía remediarlo me encantaba mi coche, lo compre con unos ahorrillos hacia dos años atrás, un ford scord descapotable blanco, poniéndole y bautizándolo ese mismo día con el nombre “Nata ly”. Era de segunda mano y me estaba dando muchos problemas pero le había tomado cariño, mi madre se reía de mí por esa situación y me aconsejaba uno nuevo ya que ese podría acarrearme problemas y aunque no me gustara, mi madre estaba teniendo razón.

Después de varios intentos y unas palabras cariñosas “Nata ly” arranco y me alegre por ello. Menos mal que nadie había en la carretera pensarían que estaba loca si me vieran hablarle a mi coche de esa manera. Llegue al estacionamiento donde ya todos los coches de ejecutivos y actores estaban aparcados, tuve que estacionarlo al final. Baje y me dirigí al despacho del productor, llegando una hora de retraso.

- Buenos días-. Dije tímidamente, estaba avergonzada de mi retraso. El productor, un hombre alto, algo gordo, me miro algo molesto-. – Siento llegar tarde señor Tapert, se que no tengo disculpas pero mi coche se me paro que…
- No me des mas excusa señorita O´Connor, espero que no se vuelva a repetir para…-. Abrieron la puerta del despacho y entro un hombre con cara amable
- Robert, tranquilo, es su primer día, no la tomes con ella, hola-. Me ofreció su mano la cual acepte-. - Me llamo Sam, bienvenida a la serie, espero te sientas a gusto con nosotros-. Le sonreí, este jefe era mas amable que el anterior pensé
- Hola, gracias, no se volverá a repetir se lo aseguro

Después de conversar un rato con ambos productores, firme mi nuevo contrato de trabajo, y con un asistente me enviaron a conocer el resto de reparto que ya estaba trabajando y rodando en varios lugares. Todos me recibieron con una sonrisa y eso me gusto, eran como una gran familia y esperaba ser aceptada. Me sorprendí al saber que Lucy Lawless seria mi compañera. Ya habíamos trabajado anteriormente, solo un día, en otra serie de TV. Esta actriz me maravillaba, tenia unos preciosos ojos y su altura era descomunal y su belleza imparable, no me extraño nada que ella saliera elegida en el concurso de belleza pues lo era por fuera, sin contar lo de adentro que era graciosa, risueña, bromista y no se daba de súper estrella siendo amable con todo el mundo.

Paso un año y todos estábamos felices de pertenecer a esa serie, al publico le había encantado y a mi me habían hecho nuevo contrato. Entre todos teníamos mucha complicidad, al grado de que algunos de nosotros fuera de cámaras éramos amigos, a veces nos reuníamos y hacíamos fiestas. Entre Lucy y yo comenzó una gran amistad y teníamos mucha química, como decían algunos amigos nuestros, ese era el éxito de la serie. Pero todo cambio para mí el día que ella tomando un café en la cafetería me confió algo de su vida que no me resulto agradable.

- Renee, estaba buscándote, ¿donde te metes?-. Se sentó frente a mi
- Ya vez, recargando baterías con la cafeína-. Le sonreí-. – ¿Quieres uno?
- Si
- ¿Con leche?
- Por favor-. Me decía cogiendo el bote del azúcar-. – Tengo que contarte algo amiga
- Dime, ¿que pasa?
- Pero que se quede aquí, ¿vale?. Robert me ha pedido salir con él

Yo la miraba y quede boquiabierta, sentí en mi corazón una punzada de celos, ¿celos?,¿por que?. No me gusto que me dijera eso, mire mi café mientras ella seguía hablándome de él, de que había salido ya varias veces como amigos y que ella creía que comenzaba a sentir algo por él. Maldito estupido, tenia suerte el condenado de poder tenerla cerca, de salir con ella y….no quería pensar que la hubiera tocado, esa situación me enfermaba. Pero no debía pensar así, ella era mi amiga y si él la hacia feliz debía respetarlo y apoyarla.

- Me alegro por ti amiga-. Le dije mirando mi café
- Vaya..pues por como lo dices, parece que no es así
- No…si, si, en serio me alegro-. Le eché una sonrisa fingida-. – Si él te hace feliz, adelante, yo seré feliz con la persona que te haga feliz
- Gracias amiga no esperaba menos de ti, siempre me has apoyado en las buenas y malas, gracias por todo-. Se bebió su café de un sorbo y dándome su mejor sonrisa se marcho a trabajar-. – Nos vemos al rato-. Me decía dándosela la vuelta

Yo me quede quieta, sin palabras pero con muchos pensamientos, raros, raros por que comenzaba a sentir algo por ella. Lucy siempre me había apoyado en todo y en el trabajo me ayudaba muchísimo. Y de un tiempo a esta parte no me gustaba que ninguno se le acercara, o que le bromearan diciéndole lo hermosa que era. En mis noches pensaba en ella, me sentía avergonzada cuando ella bromeaba conmigo y el sentir el contacto de una mano suya o un abrazo me encendía sobremanera. Debía olvidarme de ella, y de esos sentimientos, debía estar con ella por que era mi amiga.

Ese día paso, y el siguiente y muchos más. Un mes después ella ante mí se mostraba feliz y yo me escapaba cada vez que él se acercaba a nosotras y nos separaba. No quería verla sonreír, no por que no deseara que fuera feliz, pero no con él, quería que estuviera conmigo.
No se si Robert se percataba de mi situación pero comenzó a pedirme cosas extras en el trabajo o a anularme en cuestiones que yo proponía. Pero yo seguía a lo mío, no quería ser un impedimento y nada mas me dedicaba a cumplir mi trabajo y ya.

Llego una compañera nueva de reparto, una mujer maravillosa, estupenda y ya con su carrera consolidada como actriz, su nombre Kathryn, aunque pidió que la llamáramos Katy. Ella debía hacer que su personaje hiciera dudar al mío y alejarme de Xena. Ese día el trabajo fue duro y estaba cansada. Me marche rápido no quería encontrarme con Lucy ni Robert, a pesar de que ella me había pedido hablar de unas cuestiones, no quería verla, me estaba comenzando a lastimar demasiado su presencia.

Salí y arranque, cogiendo la carretera en dirección a mi casa, solo pensaba en llegar y meterme en la bañera a relajarme. Nuevamente “Nata ly” volvió a fallarme, bueno no del todo, ya que una rueda pincho y me Salí del camino después de una maniobra. Baje de mi coche y mire lo ocurrido, no podía creerlo, es que todo me pasaba a mi, llevaba toda esa semana con muchos problemas y ahora esto, comencé a pensar que me habían echado una maldición. El teléfono no tenía batería, esto parecía surrealista. Saque la rueda de repuesto, no sabía como ponerla pero comencé a hacer el intento. La calle estaba desierta y no había ninguna luz solo la que yo tenía en la mano para alumbrar la rueda. Miraba a mi alrededor y me asusto tanta oscuridad, le pedí a mi ángel de la guarda que me ayudara que no podía pasarme tanto junto en tan poco tiempo, parece que me escucho a lo lejos divise una luz. Me acerque al borde de la carretera y agite mis brazos, luego me arrepentí, ¿y si era algún loco?.

El coche no tenia intención de pararse, lo veía venir a gran velocidad, así que mejor me aleje un poco y mire a ver su reacción, paso ante mi con menos velocidad pero no se detuvo, hasta que lo hizo un poco mas lejos. Yo, quede quieta a la expectativa y vi salir a una mujer, la distinguí rápidamente a pesar de la oscuridad, era Lucy.
Camino hacia mi, mientras el conductor bajo, era de suponer que era él, mientras le gritaba.

- Lucy, vuelve aquí, ya es mayorcita, que se arregle sola
- Rob-. Se giro a verlo-. – Déjame en paz, te pedí que pararas y punto, debemos ayudarla
- Si no vuelves inmediatamente, me subiré al coche y te quedaras aquí tirada
- ¿Me estas amenazando?....¿sabes que te digo?, que te vayas a la mierda Rob, lárgate y olvídame

Vi como Rob se montaba en el coche y se alejaba a gran velocidad, ella llego a mi altura.

- Hey Ren, ¿que te ha pasado?-. No me gusto que discutieran pero me gusto la forma en que ella se hizo de valer y que prefiriera ayudarme a irse con él
- Amiga, siento que hayas discutido, pues ya ves aquí estoy que todo me sale mal, se me pincho una rueda y el teléfono no me sirve y no se cambiar la rueda-. Mi cara parecía un poema de tristeza
- Ven aquí-. Se acerco y me tomo por los hombros-. – Vamos a ver como podemos solucionarlo. Nos acercamos a mi coche-. – Bueno esto con las herramientas adecuadas se arregla, ¿las tienes?
- Si amiga si, pero como te digo no se hacerlo, ¿no seria mejor llamar a una grúa?, tu teléfono….
- Se lo ha llevado Rob….-. Miro hacia arriba ya que estaba abajo cogiendo las herramientas-. – ¿Que tal si me hechas una mano y me alumbras?
- Si, claro, ¿sabes cambiar la rueda?
- Si-. Me sonrió, mientras volvía a mirar a la rueda que estaba por cambiar
- Hija, eres una mujer multiusos ¿eh?, sirves para todo, ojala estuvieras conmigo en…
- ¿En donde?
- Nada amiga nada

Después de veinte minutos que a pesar de estar en esa situación nos reímos y bromeemos como antaño, ella acabo de poner la rueda, momento en que un coche se nos acerco. Lo mire, era él, maldito, no quiso ayudarme y… ¿para que volvía?, otra vez rompería la magia que estaba sintiendo junto a ella y esos momentos tan bonitos.

- Lucy-. Decía mientras bajaba y se acercaba a nosotras-. – Cariño..lo siento, pero es que estaba enfadado el trabajo y…
- No Rob, no, ni el trabajo ni nada puede hacer que quieras dejar tirada a una amiga o compañera, como quieras llamarla-. Yo callada escuchaba su conversación, él a veces me miraba y no de buena gana, cosa que no entendía por que yo no había hecho nada
- Renee-. Se dirigió a mi-. – Lo siento, es que quería llegar a casa
- No te preocupes Rob, yo solo…
- Nada…no te atrevas a dirigirle la palabra Rob-. Intervino Lucy muy molesta-. – No tienes vergüenza
- Lucy por favor, vamonos, te llevo a tu casa y hablamos quiero…
- Pues fíjate que no, me ha costado mucho trabajo cambiar la rueda como para ahora irme contigo, así que es mejor que te largues
- Lucy no me voy a ir sin ti, oh…claro…ya se, prefieres quedarte con ella ¿verdad?
- La verdad si, me va a dar mejor satisfacción que tu
- No lo voy a permitir-. La agarro del brazo y comenzó a tirar de ella-. – Te vienes conmigo-. Afirmo alzando la voz, ella retiro su brazo con fuerza, lo cual hizo que me diera un codazo en mi boca ya que estaba detrás, sentí un gran dolor y perdí el equilibrio cayendo al suelo. Ella se acerco a mi.
- Dios mío, Ren, ¿estas bien?, lo siento, lo siento. ¿Ves lo que me has hecho hacer?-. Le grito furiosa-. – Márchate Rob, no quiero verte mas
- Pero si yo….
- Que te largues-. Grito
- ¿Sabéis que?, estáis locas, ambas estáis mal, quedaros aquí o haced lo que os de la gana-. Se marcho. Ella me levanto
- Lo siento Renee, no sabes cuanto lo siento
- No te preocupes-. Le dije mientras ella elevaba mi rostro para mirarme, me dolía bastante, sentí como mi boca se hinchaba-. – Solo fue un golpe sin importancia
- ¿Sin importancia?, no es lo que me parece a mi-. Mi sangre comenzó a salir-. – Ven, vamos te llevo a casa-. – me puso su pañuelo para detener la sangre

Ella conducía y no quería engañarme a mi misma por que si me dolía, la miraba y ella me miraba, tenia su mirada triste y preocupada, se sentía culpable, pero no tenia por que. Pensé que ese instante a pesar de que estaba en esa situación me gustaba, a pesar de que me dolía la tenia conmigo. Si, no había duda, ahora sabia lo que sentía por mi amiga, me había enamorado de ella sin remediarlo. Llegamos a mi casa y entramos en ella.

- Gracias por todo Lucy-. Le decía colgando las llaves en su lugar-. – ¿Quieres que te llame a un taxi o…?
- Vaya, creí que por lo menos me invitarías a tomar algo…además no me voy a marchar hasta que te cure esa herida
- Claro, si, ¿que deseas tomar?, perdona, pensé que querías irte ya no te quiero ocasionar mas problemas
- No me has ocasionado problema Ren. Que tal algo para beber tengo sed. Voy a buscar el botiquín ahora vuelvo-. Ella conocía mi casa, no era la primera vez que la visitaba y sabia donde encontrar cada cosa. Lucy regreso cuando yo depositaba dos bebidas en la mesa del salón
- Bueno, vamos a ver esa hermosa cara, que a pesar de estar sangrando es preciosa-. Me dijo mientras me sonreía y se sentaba frente a mi en otra silla. Me tomo de la barbilla y comenzó a limpiar la sangre con alcohol, su juego de palabras me gustaba antes, ahora me ponían nerviosa
- No creo que este muy bonita, tendré que hacer muchas filigranas para que no se me note para el trabajo
- No me importa lo que creas, yo te considero bonita y no te preocupes creo que para el lunes esto se te habrá pasado y si no es así, tomate unos días libres, seguro Katy te acompañara-. ¿Por que la nombraba?, si, cuando esta compañera llego y por que trabajábamos en muchas escenas juntas pues nos hicimos amigas pero en mi mente no la hacia, ¿ella si?
- ¿Katy?....mmmm…no entiendo amiga, ¿por que me dices eso?
- Bueno he visto que últimamente estáis mucho tiempo juntas-. Me sonreía picarona
- Solo lo necesario, pero si, creo que es una buena persona y amiga y…
- Lo ves…creo que hay algo mas, creo que…
- Por Dios Lucy…¿pero de que demonios hablas?-. Me indigno, que me estaba dando a entender que era…y para que negarlo si lo era, pero no le confirmaría a ella nada. Acabo de curarme la herida y se alejo un poco de mi mientras seguíamos una frente a la otra, la mesa nos separaba.
- Ren…cariño…no lo niegues, creo que tengo la suficiente confianza contigo para que me lo cuentes
- ¿Contarte que?-. Me salio una sonrisa nerviosa
- Creo que….bueno…que eres gay, ¿lo eres?-. Nerviosa me levante de la silla a caminar por el salón, me acerque a la puerta que daba a mi jardín-. – Dime Renee, ¿lo eres?
- Nooooooo-. Le conteste nerviosa, sin mirarla, estaba avergonzada, ¿por que me preguntaba eso? ¿Tanto se me notaba?
- Amiga, no te preocupes…por mi no hay problema si lo eres, yo…
- No lo soy-. Me di la vuelta furiosa-. – ¿Por que crees que lo soy?-. si ella me preguntaba yo también haría lo mismo
- He visto como has mirado a Katy, y veo que tu mirada se ilumina cuando estas cerca de ella-. Vaya respuesta estupida me daba, yo muriéndome por ella y creía que miraba a otras, ¿seria posible que ella no se diera cuenta como la miraba a ella pero que si me fijaba en otras?, cosa que no era así, ya que a ninguna compañera la había mirado como ella me insinuaba
- Estas equivocada Lucy, no he mirado a nadie de ninguna manera
- Pues a mi me parece que si-. ¿Por que me insistía?, me canse
- Y si así fuera ¿que?, que no es el caso, pero si lo hubiera hecho ¿que te importa a ti?-. La desafié quería ver su cara-. – Tu estas con el baboso de tu jefe y yo no te digo nada, ¿alguna vez te he reclamado o te he comentado algo?, no, pues entonces déjame ya con tanta pregunta tonta
- Renee, no te enfades, no creí que pensaras así de Rob pe…
- Lucy por favor, dejemos esta conversación-. Me fui a la cocina, quería calmarme me sentía celosa, furiosa y encima ella preguntando tan directa, la verdad me molestaba. No tardo en aparecer en la cocina, apoyada en la puerta
- Renee, lo siento no quise molestarte con mis preguntas, solo quería que me dijeras la verdad, soy tu amiga y creo que me la merezco después de todo este tiempo
- Lucy-. La mire-. – Estamos hablando estupideces, creo que es mejor que te vayas a tu casa-. Me acerque para salir de la cocina, ella me lo impidió poniendo su cuerpo de obstáculo
- No son estupideces amiga, no para mi, te quiero y quiero saber que le pasa a mi amiga, no quiero que….
- ¿Que Lucy?, ¿que?, ¿estarás contenta si te digo que soy gay?, ¿te sentirás mejor si te lo confirmo?, ¿cual seria la diferencia?. Hazme el favor Lucy-. Le pedí que se apartara con mi brazo-. – Déjame salir, quiero ir….
- No vas a ir a ningún lado
- Pero…. ¿que quieres de mi?
- Que me digas la verdad
- ¿Que verdad?-. Le pregunte cansada de esa situación. Ella me tomo por la cintura y me arrastró hacia ella, besándome. Mi piernas flaquearon, sentir sus labios fue una sorpresa y una satisfacción.
- Lo siento Renee, lo siento-. Se retiro y sin mas se dio la vuelta marchándose de mi casa, yo quede perpleja antes esa situación, no podía moverme, no reaccione hasta pasado cinco minutos.

Me acosté en mi sofá, mirando el techo pensaba en todo eso, que parecía un sueño, que parecía que no había ocurrido, ¿por que me beso?....pero…no sabia que pensar, mi cabeza daba vueltas y vueltas y todo el fin de semana así la pase, no salí de casa, solo pensaba y caminaba y no llegaba a ninguna conclusión. El domingo en la noche Katy me llamo, tuvo problemas con su coche y me pidió por favor que la llevara al trabajo, asentí y quedamos en una cafetería para desayunar e irnos juntas al set de grabación.

Estábamos conversando mientras la camarera nos servia el desayuno que teniendo una hora de tiempo pedimos algo mas que café. Reíamos, me encantaba esta mujer, era dulce y me contaba como era tan feliz con su actual relación, pues la anterior le había hecho mucho daño. A pesar de que me tape el golpe, cosa que Lucy se equivoco pues aun tenia un morado, Katy se dio cuenta y me pregunto por lo ocurrido. Inventándome una excusa, ya íbamos camino al trabajo. Llegamos, sentía nervios, debíamos rodar juntas y no quería hacerlo, ni sabia como Lucy reaccionaria. Después de maquillaje la vimos que ella ya estaba lista para grabar mientras Katy y yo aun debíamos ir a vestuario. Katy acabo antes y yo aun vistiéndome, vi que alguien abrió la puerta.

- Manu, lo siento debes traerme hilo amarillo por que no podré….
- Manu vuelve en unos minutos-. Me decía Lucy mientras la veía con su traje de Xena que me fascinaba verla con el, cerro la puerta con la llave-. – Debemos hablar-. Me asusto el cierre del pestillo y dude
- Lucy….mmmm…yo….escucha….no….que….quiero decir….que…
- No me tendrás miedo ¿verdad amiga?-. Se acerco a mi, yo me tape mis piernas que estaban al descubierto con un manto que vi echado en el sillón
- Para nada-. Le sonreí tímidamente-. – Es que creo que este no es momento para hablar
- ¿Por que no?, pero para ella si tienes todo el tiempo del mundo ¿eh?
- ¿Para quien?
- ¿Te quieres quedar conmigo Renee?, ¿o realmente crees que soy tonta?
- Ni una cosa ni otra Lucy, pero si no te explicas mejor
- Te he visto
- ¿Me has visto?
- Si, con Katy, esta mañana, en la cafetería, mientras ella te tocaba la cara, mientras….
- Ya…Lucy ya…déjalo…no es lo que estas pensando, pero de igual manera no tengo por que darte explicaciones…así que abre la puerta, debemos ir a trabajar
- ¿Quieres salir de aquí? Cogela tu misma-. Metió la llave por su escote
- ¿Pero te has vuelto loca?...Lucy por Dios, ¿pero que te pasa?, ¿por que me haces todo esto?
- No me pasa nada amiga, si quieres salir cogela, nadie te esta impidiendo salir-. Extendió sus brazos ofreciéndome su cuerpo. El picaporte se movió, preguntaron, querían entrar, ella no se movió, seguía con sus brazos extendidos mirándome y yo no entendía por que ella, mi amiga, Lucy, se comportaba de esa forma
- Lucy, deja de hacer tantas bobadas y abre la maldita puerta, van a sospechar, no los escuchas quieren entrar
- No me importa que sospechen, me da igual lo que piensen. Pero no voy a permitir que a ella si la dejes y a mi no
- ¿Dejarla?, ¿pero de que demonios me hablas?, tu estas muy mal de veras amiga muy mal
- Si, por tu culpa, por que tu me has hecho sentir cosas nuevas, ¿por que a ella la dejas y a mi no?, ¿acaso no te gusto?-. Se acerco estando a centímetros de mi
- Pero que yo no dejo a nadie-. Le grite, la puerta se abrió y entraron dos personas que cayeron justo a nuestros pies, por tratar de abrir la puerta a empujones.

Sali rápidamente a pesar de que no estaba vestida y marche a mi camerino, cerré con llave y comencé a vestirme. Nuevamente Sali después de un rato y Sam se interpuso en mi camino, me dijo que debía grabar algunas escenas. Le pedí el día, él supongo me vio agobiada y me lo cedió. Lo necesitaba, estaba cansada de cómo Lucy se estaba comportando, no quería ese tipo de amistad, pero.... ¿por que me hacia eso?, ¿que quería probar?, ¿a lo mejor quería probarse ella misma?, ¿yo le había hecho sentir cosas nuevas?, si eso era así…posiblemente ella…no, no podía arriesgar nuestra amistad y decirle lo que sentía, aunque bien pensado tampoco quería esa amistad tan rara en mi vida.

Camine todo el día, pasee por muchos lugares, acabando donde mas me gustaba en el océano. Camine por la arena con mis pies descalzos y miraba el mar. Sentir el viento en mi cara me tranquilizaba y respirar hondo me daba vida. Llegue hasta las rocas, miraba el horizonte, vi a alguien arriba, vi extender sus brazos y dejarse caer, miraba detenidamente, no salía, debía ayudarle. Nade lo mas rápido que pude y tarde un par de minutos en llegar, bucee y busque y encontré el cuerpo de una mujer inerte bajo el agua. La cogi la eleve y salimos a la superficie, mi cara se descompuso cuando vi que era ella, mi Lucy. Nade rápidamente a la orilla y la puse en la arena, comencé a darle masajes en el pecho después de romper su camisa blanca que llevaba, le di respiración.

- Vamos cariño, vamos-. Seguía dándole respiración-. – No puedes dejarme, ¿por que? ¿Por que lo has hecho?, vamos mi amor, despierta, te quiero, te amo mas que a mi vida, despierta-. Le grite, mi llanto salio y se volvió desconcertado cuando ella me rodeo con sus brazos y me giro poniéndose encima de mi sin dejar de besar mi boca
- Repítelo…sabia que me amabas-. Me decía tan cerca de mí que sentía su mirada clavada en la mía. ¿Había fingido?, no podía creer lo que me había hecho pasar, quise levantarme pero ella me sujeto las manos hacia atrás manteniéndome prisionera con su cuerpo encima
- Lucy…maldita seas tu y tus locuras, voy a matarte yo misma, déjame levantarme
- No…me da igual que me maldigas, me da igual que me creas la persona más mala del mundo, pero no te voy a dejar escapar hasta que no me des las respuestas que quiero-. Trate de soltarme, hacia el intento, pero era evidente que ella era mas fuerte y grande que yo
- Renee si sigues haciendo eso te vas a lastimar mas las muñecas
- Pues suéltame-. Le grite enfurecida
- No, no lo voy a hacer hasta que me contestes lo que deseo-. Deje de intentarlo, tenia razón, me iba a lastimar mas, y ya no aguantaba mas, si lo que quería era mi confesión se la daría
- ¿Que quieres saber?....estoy cansada Lucy, muy cansada de todo esto, de toda esta situación que estas provocando en mi y en mi vida, ¿sabes que?, a toda pregunta te contesto que SI. ¿Te quiero?, si, ¿Te amo?, si, ¿Te deseo?, si, ¿tengo celos?, si, ¿daría mi vida por ti?, si-. No aguante mas y mis lagrimas cayeron de mis ojos, estaba agotada mentalmente-. – Lucy todo es un si, no entiendo por que me tratas así, por que actúas así, ¿por que te gusta lastimarme?
- No quiero lastimarte Renee, es que…lo siento, no se por que me he comportado de esta forma, te deseo, siento cosas que nunca sentí amiga y cuando te veo con katy no puedo aguantarlo. Y siento unos celos enfermizos de pensar que ella te ha tocado y yo no, de que ella ya te poseyó y yo no, de…
- Lucy por el amor de Dios, nadie me ha hecho eso, ni katy ni nadie, no puedo ser poseída por que ya lo he sido por ti, mi alma, corazón y cuerpo te pertenecen desde hace tiempo
- No llores amor-. Me quito unas lagrimas, me amaba, si sentía esos celos es que me amaba y lo corrobore-. – Renee, te amo
- Puedes soltarme ya, por favor-. Le suplique sonriéndole
- No, me gusta esta postura-. La cual cambio sujetándome solo con una de sus manos las dos mías y bajando con la otra por mi cintura, acariciándome, subiendo nuevamente a mi mejilla-. – Eres tan preciosa Renee, tan bonita, tan bella, que aun no me creo que te tenga así-. Su mano volvió a bajar y mi corazón latía rápidamente, mi excitación comenzó y su mirada lujuriosa me incito mas, quería tocarla, quería acariciarla, pero ella no me permitía
- Déjame Lucy, suéltame, quiero….-. Me cerro la boca con un beso pasional, siguiendo a mi cuello, devorándoselo

Todo nuestro amor fue consumado en esa playa, una y otra vez, hasta el anochecer. Marchamos cansadas a mi casa y continuamos entrándonos la una a la otra con todo nuestro amor y pasión prohibida, esa pasión que tanto como a ella y a mi nos devoraba nuestros cuerpos por no realizarla, hasta que todos nuestros deseos se volvieron realidad y explotamos consiguiendo todo el amor mutuo que nos dimos. Mis mañanas a partir de hay fueron diferentes, cariñosas, amables, hermosas y complacidas pues a mi lado estaba el amor de mi vida.

FIN

FanReals: Recuerdos Sin Olvido

RECUERDOS SIN OLVIDO
(Por LadyAxR)

Agarre mi sombrero y sali por la puerta de la cocina dirigiéndome a un pequeño huerto que tenia en la parte trasera de mi rancho. Me gustaba estar en el, me gustaba cuidar mi propia verdura y me relajaba. Estuve un tiempo y llego uno de mis trabajadores diciéndome que tenían problemas con el parto de una vaca. Después de solucionar el problema que me llevo toda la tarde, pude descansar un rato antes de que mi hijo llegara con su familia, cosa que me encantaba recibir esas visitas pues adoraba a mis nietos y no eran muy común que vinieran, pero esa vez me dijeron que se quedarían unas pequeñas vacaciones conmigo, me fascino la idea.

Yo, hacia tiempo vivía sola, ya que enviude, dos años atrás y me dedique exclusivamente al Rancho que mi esposo y yo construimos hacia ya 10 años atrás. Mi vida ese día cambio cuando compramos el rancho, anteriormente me había dedicado a ser actriz, la verdad era algo que me encantaba y aun me gusta aunque decidí parar un tiempo, ya me cansaba tanto foco, luces, cámaras y ese tiempo paso a ser diez años y ahora me siento feliz, con un rancho prospero y aire puro todos los días. A veces a pesar del tiempo hay prensa que me busca pero siempre procuro no tener contacto, no quiero que mi vida se perturbe o la de mi familia.

Me miraba en el espejo recién salida del baño y a pesar de tener 50 años me conservaba bien, era bien cierto eso que dicen que el aire puro y libre rejuvenece. No es que me importara mucho ni mi edad, ni si me veía muy bien, pero siempre una mujer desea agradarse interior y exterior. Me vestí lo mas rápido que pude pues había escuchado llegar un coche, me asome por mi ventana y vi a mi hijo salir. Ya habían llegado y yo no estaba lista, pero lo hice rápido.

Baje corriendo y abrace a mis nietos, dos chicos encantadores que a pesar del poco tiempo que los veía me querían mucho, la mujer de mi hijo, amable, Alice, era una buena madre y mi hijo. Hacían una familia feliz y eso a mi me gustaba por que mi hijo se merecía ser feliz.

- Hijo lo siento no he podido haceros la cena que os prometí, es que tuve la tarde ocupada…
- No se preocupe Ren-. Alice sonriendo-. – ¿Por que no mejor salimos fuera y cenamos?
- Bueno, eso podría hacerse, esta bien, os invito yo al restaurante del pueblo ¿que me decís?-. mis nietos dijeron que si pero mi hijo no estaba muy por la labor
- Estoy cansando Madre, quisiera quedarme aquí
- Bien, entonces vamos a hacer lo siguiente, para cenar rápido mejor voy yo al restaurante y compro para traer a casa, ¿así es mejor?-. Les dije sonriendo
- Si, mejor-. Mi hijo agradecido
- Yo le acompaño-. Añadió Alice amablemente-. – Chicos, ustedes ya son mayorcitos, metan sus maletas en su dormitorio, ¿el de la parte de abajo Ren?
- Si
- Bien escucharon a su abuela, andando

Mis nietos siguieron a su padre mientras Alice y yo íbamos en camino al coche para ir al pueblo. No tardamos mucho, y por el camino íbamos hablando de muchas cosas. Llegamos y Willy nos atendió rápido, fue un gran amigo de mi esposo y nos apoyo cuando recién llegamos al pueblo, me encantaba su restaurante, era cómodo, hogareño y con buena comida.

Cuando ya volvíamos Alice reía y me decía que ese hombre estaba encantado conmigo y que ella creía que estaba enamorado, yo nada mas me reía y lo negaba. Pero eso era algo que mi esposo también ya antes me había comentado, cosa que yo siempre le decía que era imposible, de todas formas yo no lo quería y como mi esposo me decía, no era mi culpa ser tan guapa, lo extrañaba, echaba de menos sus comentarios y sus cuidados y su amor. No fue el amor de mi vida, pero fue un amor bonito, limpio y puro. Cuando llegamos, pusimos la mesa entre las dos y no tardaron en bajar de sus habitaciones cuando nos escucharon en el salón.

- Abuela, ¿sabes que has salido en las noticias?
- ¿En las noticias?-. Mire a mi hijo
- Yo no se nada, yo no he visto nada pero ellos dicen que te han visto
- ¿Así?, ¿y que decían cariño?-. Mis nietos no eran muy mayores 6 y 8 años, pero entendían bastante
- Pues ha salido unas imágenes de cuando trabajabas en la serie Xena, ¿te acuerdas?
- Si mi amor-. Vaya si me acordaba de esos momento, fueron muy gratos y de ella, jamás olvidare su rostro ni sus ojos azules hasta el día de mi muerte, siempre en mi corazón me llevare ese amor que ella no se atrevió a vivir junto a mi-. – ¿Y de que hablaron?, ¿que decían?
- Pues hablaron de Gabrielle y de Xena y de los otros actores y de que si se iban a reunir y….
- No dijeron eso tonto-. A sus ocho años quería saber mas que nadie y siempre callaba a su hermano
- No le llames así-. Le riño mi hijo-. – Pídele perdón a tu hermano
- Perdona-. Le dio un beso. - Pero es que dijeron mas, no solo eso, estaban hablando de si tu abuela que te habías alejado de eso, pues irías al funeral de Lucy como fuiste al funeral de Xena
- ¿Funeral?-. El mundo se paro para mi en ese mismo instante, Dios, no podía creerlo, Lucy, ¿muerta?-. – A ver díganme bien, ¿dijeron que Xena había muerto?
- Si, bueno que Xena había muerto y la actriz, o eso entendimos

Mis lágrimas brotaron de mis ojos, no pude contenerme, mi hijo se acerco a mí, sabia lo que yo quería a Lucy, me abrazo. Me consolaba mientras me llevaba a la cocina, no quería que sus hijos me vieran así, y era lo mejor. ¡Dios!, Lucy, mi Lucy, no podía creerlo, ¿como era posible?, tantos años la soñé, tantos años la ame y ahora ya no estaba se había ido para siempre, sin poder amarla como yo lo deseaba, sin poder tenerla a mi lado.

Su belleza desapareció y no la vi, no la veía desde hacia muchos años pero siempre la ame y la ame por toda mi vida y mas allá de ella. Mis lágrimas no cesaban, mi hijo me sentó en una de las sillas de la cocina y me dio un vaso de agua, que apenas si pude pasar por mi garganta. No podía quedarme hay sentada debía llamar a su hija Daisy, debía saber que había pasado, hacia mucho tiempo que no hablaba a su casa pero debía hacerlo, no podía dejar de ir a su entierro.

- Cariño, hijo búscame el teléfono, debo hablar a Daisy
- Si madre, claro, ahora mismo te lo traigo

Vi Salir a mi hijo y mis lágrimas seguían recorriendo mis mejillas, pensando en esa perdida que aun no me creía, ¿como era posible?, Dios se la había llevado tan pronto, apenas recién cumplidos los 56. Nunca escuche que ella tuviera nada malo, su carrera seguía en auge y seguía siendo la gran Lucy Lawless, actriz, cantante y buena persona. Mi hijo llego con el teléfono.

- Madre, tranquilícese por favor, se va a enfermar-. Me decía abrazándome
- Si, perdona hijo es que…no me creo esta noticia
- Ya me imagino, toma, llama y averigua bien a lo mejor los chicos se han confundido
- Si, tienes razón

Recordaba el numero a la perfección, muchas veces antaño lo había repetido tan solo para poder escuchar su voz en el contestador, me conformaba con eso. Nadie me contesto y eso me hizo empezar a desesperarme. Decidí hablar a mi hija, ella tenia el teléfono de Daisy, ellas si seguían viéndose y eran amigas.

- ¿Dígame?
- Iris, hija, te llamo por….
- Ya me lo imagino madre, estaba apunto de llamarte, creo que deberías venir a la ciudad, ella te necesita en estos momentos, necesita una buena amiga en quien apoyarse
- Si, claro que voy a ir ¿pero como ha pasado?, ¿por que?, ¿que fue lo que ha ocurrido?, cuéntamelo todo, ¿Daisy como esta?
- Fue un terrible accidente, un camión se pasó un alto madre, Daisy esta bien, bueno apoyando a su madre pe….
- ¿Madre?, ¿Lucy?, ¿ella esta bien?-. Mi corazón dio un vuelco de alegría, una breve esperanza
- Si, claro madre, claro que esta bien, pues dentro de todo lo lleva como puede, pero necesita una amiga que….
- Bueno….entonces…a ver que no me entero bien, es que en la televisión los chicos escucharon que Lucy…Lucy había muerto
- Oh…no….no, gracias a Dios no, madre fue Rob, Lucy esta muy mal, Daisy me llamo y me contó lo ocurrido, esta noche estaré en su casa con ellas, voy ayudar a Daisy a preparar el sepelio, Lucy no esta muy bien, es un golpe duro para ella
- Es lógico-. No deseaba que a Rob le pasara nada, pero mi corazón se tranquilizo al saber que ella estaba bien, debía ir a su lado, debía estar junto a ella-. – Hija, voy a coger el primer vuelo que salga, voy a llamar al aeropuerto, luego de llamo a tu teléfono
- Madre, mejor llámame a casa de Lucy, me voy en cuanto te cuelgue para allá
- Esta bien, así lo haré, hasta luego
- Adiós

Le conté a mi hijo lo ocurrido y me ayudo a hacer una pequeña maleta, me recomendó esperar pero yo no quería, deseaba llegar cuanto antes, no podía dejarla sola en ese proceso. Aun recuerdo cuando mi esposo murió, ella me dejo recado con su hija, estaba fuera del país trabajando y se disculpo por no poder estar a mi lado. Pero yo estaba cerca y debía ayudarla, debía consolarla y ser un apoyo para ella. Mientras yo acababa de cerrar mi maleta junto a mi hijo, su esposa me ayudo con mi billete de avión, buscándome el primer vuelo.

- No hay vuelos, solo hay uno a las 6 de la mañana-. Alice me confirmo cuando mi hijo y yo bajamos con mi maleta
- Pero debe de haber uno, cualquiera, aunque sea en privado o…
- No hay nada Renee, lo he comprobado por todas las compañías y por precios, pero nada
- Maldita sea, pero debe haber algo, no es posible que saliendo un avión cada dos horas no haya ningún vuelo, esta bien, me iré en coche
- Madre, esta loca, son las 12 de la noche, si vas en coche llegaras a las 6 de la mañana allí y para eso mejor espérese al avión de las 6 que a las 7 estaría allí
- No, me gustaría estar con Lucy y su hija para la velación de esta noche, debo ir y…ya se, avioneta, a lo mejor hay alguna avioneta privada, si voy a llamar para averiguar

Así lo hice y si lo conseguí, había un par disponibles, mi hijo me llevo al aeropuerto y me despidió, mientras yo le decía que llamara a su hermana a casa de Lucy y le confirmara mi hora de llagada para que fuera a recogerme.

El viaje duro una hora, aunque a mi me parecieron mas, llegamos bien y me acerque a la banda de las maletas coji la mía y Sali. Buscaba a mi hija y no la veía por ningún lado, pero di me di cuenta de que había periodistas y para mi desgraciada me habían visto, pensé que no me reconocerían pero me equivocaba se acercaron hacia mi y comenzaron las preguntas y los flash de las cámaras. Comencé a caminar sin contestar pero seguía sin ver a mi hija, Sali fuera del aeropuerto y nada no la veía, los periodistas seguían.

- Chicos por favor, tranquilos, les contesto a algunas preguntas y ya ¿deacuerdo?
- ¿Como se entero de la noticia?
- Por televisión, ha sido una tragedia y le doy el pésame a su familia y…
- ¿Vas a ir a buscar a Lucy?, ¿estarás con ella en estos duros momentos?
- Si, para eso estamos las amigas, he venido cuando me entere y os pido por favor que respetéis tanto la memoria de Rob como a su familia
- Si, pero…usted hace mucho que no la ve y ella no acudió al entierro de su esposo
- Bueno…ella en ese momento estaba trabajando y no pudo asistir pero eso no quiere decir que no me llamara y me correspondiera como la amiga mía que es, y ahora si me disculpan tengo que irme
- ¿Te vas a quedar en su casa?, Renee, ¿estarás junto a ella a partir de ahora?

No respondí a ninguna pregunta mas, mi hija se acercaba me abrazo cojio mi maleta rápido y entramos en su coche. Conversamos y me puso al tanto de la situación y de que la casa de Lucy estaba rodeada de periodistas y que no dejaban de llamar.

Llegamos después de que un equipo de seguridad nos dejo pasar, retirando a los periodistas de la puerta. Cuando baje del coche, a lo lejos distinguía los flash de las cámaras que estaban detrás de la reja de la casa, me gire pensando que eso era de loco y que bueno que yo me había retirado de todo eso. Vi a Daisy salir de su casa.

- Hola Renee, que bueno que llegaste
- Hola pequeña, ¿como estas?, cuanto lo siento-. Le decía mientras la abrazaba
- Bien, bueno dentro de todo bien, mi madre es la que esta peor, aun no esta reaccionando de todo lo ocurrido, y luego con esos buitres hay pues peor
- Claro lo entiendo. ¿Lo estáis velando aquí en casa?
- Si, así lo ha querido mi madre, pero pasad dentro, ella esta deseando de verte, te ha extrañado mucho durante todo este tiempo
- Y yo a ella y a toda la familia

Entramos dentro y presente mis respetos al cuerpo de Rob, fue un gran hombre, no me lleve muy bien con él, pero era bueno y el fue el queme dio la oportunidad de trabajar en esa serie que me había dado tanto en mi vida. Mire en la sala donde el cuerpo había sido depositado pero en ese momento solo estaba la familia de Rob, a los que di el pésame y nada más ya que no los conocía. Daisy me indico que fuera a la cocina que hay estaba su madre.

Entre y allí la vi, sentada en la mesa, con un café en la mano y apoyando su cabeza en sus manos mirando hacia abajo, su cabello rubio le caía delante de la cara, al oír la puerta elevo el rostro. Sus ojos rojizos he hinchados me hizo entristecer, ella siempre era alegre, risueña y era la primera vez que la veía en ese estado. Ella me miro y se levanto, soltando un llanto de desconsuelo.

- Renee…hola, gracias por venir-. Me abrazo tan fuerte que sentí todo su cuerpo junto a mi
- Aquí estoy cariño, ¿como estas amiga?, no te preocupes ¿vale?, toda tu familia esta aquí y te vamos a apoyar y ayudar, lo siento mucho amiga, no sabes cuanto lo siento
- Gracias amiga, de veras que te necesitaba, y te extrañaba, necesitaba este abrazo de una amiga tan real como tu
- Bueno…a ver… ven, siéntate…-. Le decía mientras de las manos la llevaba de vuelta a la silla y perdiendo levemente el equilibrio tuve que sostenerla
- Hey...amiga ¿que te pasa?
- Ren, es culpa de ella lleva sin comer 24 horas, solo lleva pastillas en su estomago-. Daisy enfadada-. – A ver si tu puedes hacerla comer algo
- Eso no Lu, debes comer, si no…te vas a poner mala y eso no queremos que ocurra
- Es que no me pasa nada
- Pues debe intentarlo…escucha mejor te voy a llevar a tu cuarto a descansar un rato y te hago un caldo

Con mi ayuda la lleve a su dormitorio y la tumbe en la cama, baje a la cocina y le dije a las chicas que se encargaran de estar pendiente de la gente que llegaba al velatorio de Rob, que mientras yo le daría algo de comer a Lucy. Subí de nuevo y ella estaba mirando hacia la pared, llorando, puse el caldito en la mesa de noche y ella se giro abrazándome nuevamente.

- Cuanto te he extrañado amiga, cuanto te he necesitado todos estos años
- Yo también Lu yo también te he necesitado y jamás te he olvidado ni un día de mi vida-. Pensé que ojala eso me lo hubiera dicho en otras circunstancia y no en esta.- vamos Lucy debes comer algo, por favor inténtalo
- Esta bien-. Me soltó y se recostó en la cama

Después de comérselo todo gracias a Dios, estuve un rato hablando con ella y tranquilizándola en lo que podía y calmándola en lo que me permitía, la vi cerrar lo ojos, eso me alivio, quería que descansara, debía hacerlo para así aguantar, me levante de la cama, pero su mano cojio la mía.

- No te vayas, no te vayas por favor, quiero que estés aquí cuando despierte, quiero descansar junto a mi amiga
- Esta bien Lucy, tu tranquila, duérmete, descansa-. Me puse a su lado y nos acomodamos quedando yo sentada, apoyada en el cabezal de la cama y ella depositando su cabeza sobre mis piernas
- No vuelvas a dejarme amiga, por favor no lo hagas, tengo miedo
- Lucy, descansa-. Le acariciaba su cabello-. – No me iré a ningún lado aquí estaré cuando despiertes, te lo prometo

Dormida ya, la veía descansar, me gustaba mirarla, se veía tan linda, parecía que no habían pasado los años por ella, su respiración estaba relajada y sentir su cuerpo junto al mío me emociono, me gustaba. Ella siempre había sido la fuerte la que apoyaba a todo el mundo y ahora estaba derrumbada, ahora ella necesitaba ayuda y yo no me negaría a dársela, la ayudaría en todo lo que pudiera.

Siempre la había amado, siempre la había querido y mi amor seguía vigente, aunque cada cual siguió su camino, con su familia y nos separamos, pero ahora podíamos volver a retomar nuestra amistad, esa amistad que nunca debió dejarse, pero que lo hicimos por el bien de ambas.

Antaño tuvimos nuestros encuentros, un par de veces nos amamos, pero eso quedo en el olvido, supongo para ella, pero no para mí, que aunque yo fui muy feliz con mi esposo, a veces cuando hacia el amor con él y cerraba mis ojos la veía a ella. Pero eso ya era pasado y debía seguir siendo así, ahora estábamos en otro tiempo, éramos amigas y así debía seguir siendo. Cerré mis ojos, quería descansarlos para si poder y aguantar toda la noche. En una hora ella abrió sus ojos.

- ¿Ren?
- Si, dime-. Seguíamos en la misma postura, me miro
- Gracias por estar aquí, nunca tendré nada con que pagarte lo que estas haciendo por mi
- Ya lo has hecho amiga, con esa mirada

La ayude a incorporarse y después de estar hablando un rato mas, salimos para seguir con el velatorio. Más amigos llegaron, dándole el pésame a toda la familia. Lucy se mantuvo fuerte y saco adelante esa noche y el día siguiente en el cementerio y la siguiente semana estuvo acompañada por mi hija, la suya y yo.

Sentadas comiendo, las cuatro conversábamos, Daisy nos contaba lo que le había pasado en su trabajo y yo decidí que hay ya les iba a decir que debía marcharme. No podía quedarme mas, no quería hacerlo a pesar del acoso de la prensa me sentía muy a gusto con ellas en esa casa.

- Hoy me han llamado, debo marcharme, me reclaman en….
- ¿Como que vas a marcharte?-. Lucy me reclamo. – No puedes, me dijiste que te quedarías a…
- Si Lucy, se lo que dije, pero es que debo ir a casa, si quieres me….
- No, quiero que te quedes, necesito que te quedes
- Madre-. Daisy intervino-. – Debes dejarla ir, ella tiene un rancho que atender y…
- No, no es justo
- ¿Justo?....Lucy escucha, debo…
- Creo que es mejor que las dejemos solas, vale daisy?
- Si, creo que es lo mejor

Ambas se levantaron y Lucy hizo lo mismo llevando su plato a la cocina, allí la alcance, debía explicarle, no quería que me fuera pero debía hacerlo, debía atender mi casa y mi hijo aun seguía esperándome.

- Lucy por favor, no te enfades, lo siento, pero en el rancho tengo cosas que hacer, mi hijo aun esta allí con su familia
- Pero me dijiste que te quedarías
- Y así a sido amiga, llevo una semana y me quedaría mas pero me es imposible

El teléfono sonó y el contestador salto, nuevamente los periodistas querían saber, querían averiguar y ella se desespero y descolgó fuertemente el teléfono de la pared.

- Estoy cansada de todo esto amiga, muy cansada, estaba aguantando por ustedes pero si se van me voy a morir aquí, no sabré que hacer
- Claro que si, tu eres fuerte y sabes llevar a toda esta gente
- No, ahora no, me cuesta, ya no soy como antes Ren ya….da igual, tranquila, márchate, vuelve cuando puedas-. De pronto una idea paso por mi cabeza
- ¿Por que no vienes conmigo?
- ¿Que?
- Si, eso es amiga, vente conmigo, en mi rancho estarás tranquila no abra prensa y tendrás aire puro y podrás relajarte y recargar baterías, ¿que me dices?
- Renee, no soy mujer de campo, ya sabes que lo mío es la ciudad y prefiero….
- Vamos, anímate, harás cosas diferentes, tu trabajo lo has dejado por un tiempo pues tomate unas vacaciones en mi casa, te tendré como una reina ya veras
- ¿Como una reina?...mmmmm pues eso me hace dudar entonces-. Sonrió, era su primera sonrisa desde que su esposo falleció, y me gusto que me la diera a mi
- Lucy en serio haré que te lo pases genial, vamos, vente conmigo no puedes negar que es una gran idea
- Bien, me iré contigo, iré por un tiempo
- Perfecto-. Le sonreí y guiñándole un ojo continué-. – preparare el viaje saldremos esta noche

Preparamos las cosas y ella como siempre en eso no había cambiado viajaba con muchas maletas. Dejo la casa a cargo de Daisy y nos escapamos hacia el aeropuerto por la puerta trasera para que los periodistas no se dieran cuenta, y lo conseguimos. Después una hora de vuelo llegamos a mi rancho.

Un trabajador me contó que mi hijo se había marchado y que había quedado en llamarme en la noche. Me desilusiones pero el ver a Lucy conmigo me gustaba, jamás pensé en tenerla en mi casa, se nos hizo tarde mientras preparábamos la cena en el patio, pero cenamos muy a gusto y conversamos bien. La lleve a la habitación de invitados que estaba en la esquina de la parte superior y se instalo, mientras yo me aseaba en mi cuarto de baño. Salí con mi albornoz y fui a ver si todo estaba de su agrado.

- ¿Puedo pasar?-. Llame varias veces
- Claro mujer estas en tu casa-. Ella estaba con su pijama ya puesto y sentada en la cama lista para dormir
- ¿Estas a gusto?, ¿te gusta este dormitorio?
- Si gracias, estoy a gusto, gracias por todo Renee
- De nada amiga, y tu tranquila, ya veras que mañana te lo pasas muy bien, te voy a enseñar a hacer muchas cosas
- Vale

Me marche dándole un beso en su mejilla, sentir su piel me volvió loca, no, debía quitarme esos pensamientos de la cabeza. A pesar de desviar mi mente al llegar a mi cuarto tuve que volver a ducharme pero esta vez con agua bien fría.

El tiempo se fue muy rápido y ya llevábamos un mes juntas aunque a mi me parecía mucho menos, me sentía muy a gusto con su presencia. Aprendió mucho y rápido todo lo relacionado con llevar un rancho. Se veía preciosa cuando iba vestida de vaquera, con sus botas y sombrero y cuando montaba su yegua favorita.

El invierno se nos hecho encima y me encanta charlar junto a ella frente ala chimenea, quería que esa situación no acabara nunca pero debía de ser así, sabia que tarde o temprano ella se querría marchar. A veces muchas de mis noches me acercaba a su dormitorio a verla dormir, la observaba y me gustaba mucho. Mis sentimientos habían vuelto más que nunca pero ella no se acordaba de nuestro pasado.
Esa noche habíamos decidido salir con amigos a cenar y a tomar algo y Willi nos acompaño a casa, yo no sabia el por que, pero Lucy no se llevaba bien con él y eso se me hacia extraño por que Lucy siempre era amable con todo el mundo. Bajamos del coche y él me pidió hablar un segundo, Lucy se marcho a dentro.

- Dime Will, ando cansada ¿que pasa?
- Debo hablarte
- A ver dime, si es por el ganado ya te dije que...
- No, no es eso
- ¿Entonces?
- Renee, ¿te sientes bien?
- Si, ¿por que?
- Quiero decir…. ¿te sientes bien cuando estas conmigo?-. Me lo veía venir, siempre lo quise negar pero si era cierto
- Claro-. No quise ser descortés, pero debía decirle la verdad. – Will, si me siento a gusto contigo, pero amigo, no como tu quisieras, eres mi amigo y unos de los mejores, pero nada mas
- Bien, ya lo he captado, pero Renee quiero que sepas que estaré aquí para lo que necesites
- Lo se, lo se-. Le abrace-. – Tu siempre me has apoyado y siempre te voy a querer y respetar, eras el mejor amigo de mi esposo y ahora eres un gran amigo mío, gracias por todo eso
- Vale, esta bien, entra en casa amiga, no te vayas a enfriar
- Dea cuerdo

Entre en casa y lo vi alejarse por la ventana, si eres un gran amigo pero no era lo mío, no sentía ningún tipo de amor por él. Pero si sentía por esa mujer que me traía loca de amor, un amor secreto que quería sacar y no podía. Estaba sentada frente a la chimenea, miraba las llamas, sus ojos azules resplandecían. Me senté frente a ella en el otro sillón.

- Estoy agotada amiga ¿tu no lo estas?-. Le decía sin obtener respuesta y sin ni siquiera mirarme-.- Lucy….¿estas bien?
- Si-. Me contesto seca y fríamente sin dejar de mirar el fuego
- Oh…bueno…mmmm…¿nos tomamos la ultima?, ¿quieres algo?-. No me dio respuesta-. – En serio estas bien, te noto algo…
- Si, estoy bien ¿que mas quieres que te diga?-. Su mirada se clavo en mi, el fuego de la chimenea estaba en sus ojos, estaba enfada de eso no había duda
- Pero…¿por que estas enfadada?, ¿he hecho algo que te molestara?, ¿he dicho algo que no debía?. Antes estabas feliz, reías, ¿que te pasa?
- Nada, esto tiene que acabar, he decidido marcharme, mañana mismo vuelvo a la ciudad
- Pero… ¿por que?, yo creía que aquí estabas a gusto, que eras feliz
- Y lo era…lo soy…quiero decir que…hay ¿sabes que?...déjame en paz Renee, estoy cansada y me voy a dormir-. No entendí su reacción pero la retuve antes de que se marchara cojiendola del brazo
- Espera mujer, cuéntame, somos amigas, ¿que demonios te pasa?
- Nada que te incumba y suéltame por favor, quiero ir a descansar-. Trato de soltarse y la deje no quería retenerla a la fuerza
- Espera….Lucy por Dios, ¿pero por que me hablas así? ¿Por que estas teniendo este comportamiento?, ¿que es lo que te molesta?
- ¿A mi?, ¿molesta? ¿Yo?...no…. para nada amiga…¿quien te ha dicho que estoy molesta?, además por mi no te preocupes, ya sabes tu puedes irte cuando te plazca y salir con quien quieras y revolcarte con cualquiera
- ¿Revolcarme?
- Si, te he visto muy abrazadita a tu gran amigo Will, deberías a ver seguido y haberte metido en su coche y….
- Lucy por Dios, no sabes lo que esas diciendo, creo que las copas que te has tomado se te han subido de mas, si, es mejor que nos vayamos a descansar-. Trate de agarrarle el brazo y ella lo aparto velozmente
- No me toques Renee, no te acerques a mi y lárgate de una vez con ese hombre que deseas tanto, ¿que te crees?, ¿que soy estupida?, ¿que no te oigo cuando en las noches te duchas?
- Creo que es mejor que me marche a la cama y…-. Me dirigí hacia la escalera pero ella me retuvo un brazo
- Ah no, ahora no te vas, no querías hablar, pues ahora me vas a escuchar-. Me giro de golpe y me paso sus brazos por la cintura
- Esto es de locos, suéltame Lucy, por Dios suéltame-. No quería tenerla tan cerca, me estaba empezando a gustar demasiado esa situación y debía respetarla
- ¿Por que?, eso es lo que deseas ¿verdad? Que él te abrace….que te acaricie…-. Comenzó a bajar sus manos, acariciando mis muslos, las subió rápidamente y las introdujo en mi jerséis, tocando mis pechos-. – ¿Así quieres que él te acaricie para sentirte satisfecha?-. Ya no aguante mas y mi excitación aumento y sin mas….
- Así es como deseo que me acaricies tu tonta, que me ames tu, que me hagas sentir ese fuego que tengo que apagar cada noche con una ducha por el simple echo de pensar que estas en ese cuarto y que no te debo tocar, pues mereces mis respetos
- ¿Que?,¿de que me estas hablando?-. Sus manos salieron de mi jerséis y volvieron a mi cintura
- Lo que has oído, ya estoy cansada de todo esto, me muero por pensar que te quieras alejar de mi nuevamente, de que vuelvas a echarme de tu vida, cuando te miro y me sonríes me alegras el día y cuando te veo caminar me haces suspirar y si, te deseo mucho mas de lo que te imaginas, te necesito y jamás en ninguno de todos estos años te he olvidado. Y ahora me vienes con la payasada de Will y me provocas de esta forma, pues si Lucy ya lo sabes, te amo y deseo con locura y ahora que ya te lo he dicho y me he quitado este peso de encima haz lo que te de la gana, vete si quieres, de todas formas tu te olvidaste de mi hace mucho tiempo

Retire sus manos y me gire subiendo las escaleras rápidamente, quería alejarme de ella, me sentía avergonzada, quería estar sola. Ella me alcanzo en el pasillo superior, dándome nuevamente la vuelta para estar frente a frente.

- No he terminado de hablar
- ¿Y ahora que quieres Lucy?, estoy cansada de todo esto
- No me gusta que me digas que te he olvidado, por que no es cierto, yo nunca logre olvidarte, no olvide lo momentos junto a ti
- Pues parece que si, por como te estas comportando, pero te digo algo, ya da igual, déjalo así, y déjame en paz, debo de ir a darme una ducha-. Le dije con ironía
- No, esta vez….esta noche, no te vas a dar una ducha

Me agarro el rostro besándome con pasión, mi mente se fue, mi cuerpo sintió ese beso, y mi piel se erizo de emoción. Me acerco a la pared reteniéndome con todo su cuerpo, agarrando con sus manos mis manos en alto, mientras me besaba en el cuello pasionalmente, cosa que me hizo suspirar y gemir de placer. Sujetándome mis dos manos con una suya bajo la otra por mi cintura, llegando al botón de mi pantalón, desabrochándolo e introduciendo su mano en mi sexo, acariciándolo y dándome un placer irremediable.

Eso no estaba bien, no debía ser así, no en ese momento, lo deseaba si, pero no quería que fuera así, con alcohol, con esa situación y esa discusión que estábamos teniendo.

- Para…por favor…. Detente-. Saque su mano y la aparte despacio
- ¿Por que?, ¿acaso no es lo que deseas?-. Su mirada estaba encendida, me desafiaba
- No…digo si…pero…no, no así, no de esta forma, esto no esta bien, no me gusta la forma en que te comportas y no deseo hacerlo por que a lo mejor mañana me vuelves a abandonar como lo hiciste en el pasado, no quiero eso en mi vida de nuevo, no quiero sufrir
- Oh…ya…claro, me imagino, seguro lo que quieres es que él venga y te lo haga…que…
- Cállate Lucy-. Le grite, yo amándola con toda mi alma y ella me reclamaba algo insólito

Siguió reclamando y hablando tonterías, no sabia si era el alcohol o sus celos o las dos cosas juntas, la cuestión es que veía que la cosa se estaba poniendo peor y yo me notaba que también me estaba enfadando de mas, debía acabar aquello.

Trate de irme pero me retuvo agarrándome por detrás la cintura, me abrazaba diciéndome que quería estar conmigo esa noche, que quería hacerme suya, me dio la vuelta violentamente y me retuvo contra la pared nuevamente, como pude logre alejarla y le di un bofetón. Ella se quedo quieta, solo me miraba, se acerco y me beso con violencia. La separe y volví a bofetearla. Repitió la acción pero esta vez su beso cambio, era pasional y me gusto, ¡Dios! Jamás había tocado a nadie ni siquiera a mis hijos y ella había echo que me enfadara al grado de darle una bofetada

- Puedes seguir dándome bofetadas toda la noche o toda tu vida Renee, pero contra mas me des, mas besos vas a recibir
- Estas loca Lucy, completamente loca-. Mis lagrimas salieron, esa situación me superaba
- Si…tu me tienes loca de celos, tu me haces sentirme así, tu eres la persona que me provocas y me vuelves loca
- ¿Por que? ¿Por que?-. Mis lagrimas no cesaban y me deje caer al suelo, necesitaba sentarme, ella se sentó a mi lado
- ¿Por que, que?, ¿por que te amo?, ¿por que te necesito? ¿Por que quiero estar a tu lado por siempre?. Por que eres un ser maravilloso Renee, por que eres linda, por que tienes un corazón puro y bueno, solo mírate al espejo y entonces entenderás el por que de mi amor
- Ya… Lucy, ya, cállate por favor
- Pero por que pequeña-. Hecho sus brazos sobre mi y me abrazo, eso me gusto, me sentí protegida, querida como hacia mucho no me sentía, ella cambio, lo note en ese abrazo tierno que me daba, tenia razón, yo la amaba y ella me había declarado el suyo
- Te amo Lucy, te quiero-. Solo le dije sin mirarla
- Ven aquí-. Me acomodo en sus brazos, ella apoyada en la pared y yo en su pecho sintiendo su respiración, su cuerpo-.-No llores cariño, no derrames una lagrima, tu mereces ser feliz y si yo te lo puedo dar lo voy a hacer, ya a estas altura de mi vida no voy a dejarte escapar otra vez

Nos quedamos un tiempo así, no tardamos mucho en levantarnos he ir a mi dormitorio en el cual dormimos juntas. Pasamos una noche maravillosa de amor, de cariño, de confidencias. Ahora después de un año, cumplimos nuestro aniversario y le tengo preparada una fiesta. Ella se vino a vivir conmigo, en la actualidad a ella le encanta más el campo que a mi, suelo bromearle con eso y la verdad que ni la prensa cuenta se dio, solo cuando ella decidió dejar su carrera artística, le preguntaron y ella solo les contesto:

Deseo pasar el resto de mi vida viviendo al aire libre….

FIN